Poproseros, podría decir eso de qué mal repartido está el mundo o que aquí el más tonto hace aviones, pero sería quedarme muy muy muy corta… Sí, lo sé, estos comentarios son producto puro de la envidia más insana que se pueda tener, pero es que no es para menos. No sólo tenemos que aguantar a Justin Bieber que se ha convertido en toda una estrella mediática que pasa por encima hasta de Lady Gaga, todo un ídolo de masas (cosa que de verdad os prometo que no entiendo), sino que ahora hay que ver esto.
Aquí está el jovencito de 16 años luciéndose en su nuevo coche. A penas hacer tres meses que tiene su licencia, y ya luce un pedazo de carrazo de esos con lo que cualquiera vuelve la cabeza a mirar, y no es para menos porque vaya pedazo de aparato, señores, de verdad que me quedo muerta...
Ahí le tenéis en ese Lamborghini blanco (por cierto ¿en esa calle no hay más que Lamborghini? En mi calle no hay más que Clios…), una razón más para que le miremos entre mal y muy mal.
Lo que no está muy claro es si se lo ha comprado él mismo, cosa que no me extrañaría con la cantidad de euros que tiene que estar ganando la criatura del espacio, o si se lo ha regalado P. Diddy ya que le prometió que cuando cumpliese los 16 se lo regalaría… Hay que ver qué pedazo de regalos se marcan estas celebrities… yo también quiero ser amiga del cantante…
Sea como fuere, es que es para que se cague la perra varias veces.
Vía | Socialité life
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