Yo no sé vosotros pero yo soy de las que va a diario al gimnasio y, en cuanto empieza a hacer mejor tiempo, un poco de deporte al aire libre siempre viene muy bien. Bueno, pues quizá sea porque yo no soy una estrella Disney (por supuesto), ni porque me siguen los paparazzis allá donde voy (gracias a Dios), pero creo que el modelito de Miley Cyrus para correr no es el más adecuado que se diga.
Vale que quizá haya gente como yo que realmente sale a sudar y a quemar adrenalina y lo que menos importa es la indumentaria (aunque reconozco que también tengo mi punto coqueto y no salgo de cualquier forma): un pantalón corto de deporte y una camiseta de lo más cómoda. Sin embargo parece que esto de lo que hablo es demasiado poquita cosa para la nena que sale a hacer deporte con un bikini de lentejuelas (¿quién necesita un sujetador deportivo con lo antilujuriosos que son?), una camiseta escotada (hay que dejar ver el bikini, sino qué sentido) y unos sorts vaqueros que si por algo se caracteriza esa tela es por la gran movilidad que aporta, todo ello acompañado de gafas de sol de aviador de las que no se caen si haces un movimiento brusco (leáse en tono sarcástico para más indicaciones). Vamos que sólo le faltaban los tacones para completar el modelo. Tremendo.
Pero claro si Miley iba hasta maquillada para la ocasión, su novio Justin Gaston no perdió también la opotunidad de lucirse de lo lindo corriendo sin camiseta, marcando pectoral y abdominales, ¡qué sepan lo que la Cyrus tiene en casa! Eso sí, perfectamente peinada la melenilla, ¡faltaría más!
En resumidas cuentas, de lo que se trataba en esta jornada deportiva no era, ni por asomo, quemar media caloría, sino lucir palmito en una de esas circunstancias tan habituales de la vida y enseñar lo lozanos que están ambos dos. Claro que me gustaría saber cuántas vueltas a la manzana dieron, supongo que con una sería suficiente para que les sacasen las fotos bien, porque mira que si les pillan sudando la gota gorda, todos congestionados y demás cosas propias, lo mal que iban a salir y lo poco chic que iban a parecer.
Sinceramente, sigo prefiriendo mis pantalones piratas negros y mi camiseta gris, mucho más cómodo y dedicado a lo que realmente es, ¿no os parece?
Fotos | Just Jared
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