Poproseros, os confieso que soy de las que piensa que la aparición del karaoke ha hecho mucho mal. Y es que en esas típicas noches de fiesta en las que te has bebido hasta el agua de los floreros y te sientes totalmente desinhibida, si hay un sitio al que no te puedes acercar y debes de huir como alma que lleva el diablo es de esos locales, porque sino sentirás una incontrolable necesidad de coger el micrófono y empezar a berrear, con la consiguiente vergüenza ajena y dolor de cabeza que sentirás al día siguiente (siempre hay un amigo que te graba y te lo recuerda varias veces).
Pues bien, nuestras celebrities también son de las que sufren este tipo de pasión al estar en un Karaoke, o sino que se lo digan a Jude Law al que han pillado en un bar de este pelo, micro en mano, de la República Checa durante sus vacaciones dándolo todo a ritmo de 'Johnny B. Goode', donde hay que estar a todos los detalles, desde su cara y su equilibrio un tanto trastocado, a su acompañante, hasta al hombre de la pandereta...
Cari, espero que ahora no te dé por pasarte al mundo de la canción porque no sé si podría superarlo...
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