Antonio Banderas y Eva Longoria sí que saben organizar fiestones

Si este año tenemos que señalar un evento veraniego por excelencia en territorio patrio y por segundo año consecutivo, sin duda tiene que ser éste. Y es que esta prometía ser la fiesta entre las fiestas, esa que ha sido organizada por Antonio Banderas y Eva Longoria, la gala benéfica Starlite para recaudar fondos para los más necesitados. El lugar elegido ha sido Marbella, que desde que las patillas de la Pantoja se metieron en el Consistorio no ha sido lo mismo, aunque ahora promete renacer de sus cenizas cual ave Fénix.

El caso es que, sin duda, ha sido el acontecimiento entre los más grandes, y es sólo viendo los mil euritos que les costaba a cada famoso y no famoso ir a la cena y gala por cabeza, como para no serlo. Vamos, que aquí se ha tenido que rascar el bolsillo todo hijo de vecino o si no sábado casero viendo la película de la tele.

Así que veamos todos los famosos que se dejaron caer, que no fueron pocos...

Rojo que te quiero Rojo

El rojo está de moda este verano, no solamente en la vestimenta, sino también en el tono de la piel que se les queda a muchos tipo camarón tras una larga jornada de playa sin crema solar (o con ella, porque algunos ni con esas...). El caso es que una de las que no podía faltar a la cita ahora que comienza promoción de serie es Amaia Salamanca que con eso de haber retornado al hogar hace ya algunos meses como que tiene que sacar la patita de casa. Toca lucirse nena, aunque ello nos cueste una pasta, que entre el cubierto, el vestido, los zapatos y la peluquería se tuvo que poner en pico y medio la broma... Eso sí, va monísima, no me digáis que no.

Otra que lució palmito fue Marta Sánchez también muy divi, divi, para qué vamos a decir lo contrario.

Y claro, si hay fiesta en Marbella, tiene que estar la piji por excepción, o sea te lo juro. Que conste que ella tiene cash suficiente para eso y para más y con eso de que se nos ha echado novio nuevo pues como que hay que prodigarse allá donde vamos. Si es que la Lomana es mucha Lomana...

Si alguien me pregunta a qué se dedica María Bravo, creo que lo único que podría decir es que a ser amiga de la Longoria y poco más, porque sinceramente no tengo ni idea, sin embargo no se pierde junto a su BFF y si hay que echar una mano organizando fiestas, pues que no se diga.

Blancas y radiantes van las celebrities

Además de la anfitriona (espectacular, by the way), el blanco fue elegido por varias de las celebrities de la noche. Ahí tuvimos a Paz Vega que no quiso faltar (a diferencia de otros que han cruzado el charco y por aquí ya no pisan sin querer señalar a nadie, oigan...). Con escotazo de vértigo y larga melena, Paz demostró que ella sigue estupenda y, al menos, no la veo tan sumamente delgada como en ocasiones pasadas, son de agradecer los chopitos a pie de playa para algunas...

Otra incondicional de las fiestas (a falta de trabajo televisivo...) es Paula Vázquez que no sólo nos ofreció sonrisas y poses, sino que además nos dejó un amplio repertorio de fotos en su Twitter. Vamos que no nos faltó detalle.

Qué decir de Paloma Cuevas que no sea lo siempre espléndida que va, es que de esta mujer no se puede decir nada malo, quién osaría.

Y por último Eugenia Silva. Si Paz llevaba el escotazo delantero, la modelo escogió el trasero llegando casi allí donde la espalda pierde su nombre. Preciosa. Si es que las hay con porte y las hay bien portadas...

Varios, varias y una de Elena Tablada

Claro, que además de tanto estilo monocromático, también otras calebrities optaron por estampados y otras cosucas, como por ejemplo Anne Igartiburu que una vez más no me dice nada de nada... Qué le vamos a hacer... Más bien me dice cosas malas ese vestido.

También os digo que para malas, malosas las palabras que se me ocurren para este modelito floreado de Ivonne Reyes que no sé de qué tienda de chinos habrá sacado porque tela, marinera que feo es...

Aunque la palma se la lleva Elena Tablada con ese estilo entre hippie y "tengo que enseñar cacho" tan poco acertado para la ocasión. Nena, para un concierto de tu ex, vale, para una cena de gala como que no me pega. De todas formas, ¿esta no era la que iba llorando por las esquinas de lo pelada de dinero que se quedaba tras la separación? Pues parece que no es para tanto cuando se gasta mil euros en una cena más añadidos...