Hay que ver lo diferentes que pueden llegar a ser el mundo de la realeza y el de los simples y llanos mortales. Mientras que algunos nos afanamos por poder sacarnos los cuartos currando a destajo y, ya si eso, aceptar alguna que otra propina caritativa en forma de tuppers de comida o dinerillo extra de la mano de nuestra abuela, en las casas reales se destilan otras costumbres tales como pedirles collares con diamantes del tamaño de alcachofas. Cuestión de estilos…
Que sí, que la ocasión lo merecía porque era la primera aparición en público de Kate Middleton del 2014 y la nena tenía que ir guapa, no lo niego. De hecho, el vestido que utilizó para dicho evento, que era nada más y nada menos que un acto benéfico en el National Portrait Gallery de Londres, era reutilizado (un vestido azul marino de Jenny Packman) porque no está el horno para bollos y mucho menos para ir dejándose fortunas en las tiendas. Eso sí, lo de reutilizar joyas, siendo de la realeza, es otro rollo que flipas.
Más que nada porque siendo reina de Inglaterra, tu abuela tiene que tener una colección y un repertorio que me río yo de lo que uno ve cuando se pasa por Tiffany’s. De hecho, para la ocasión le pidió a la yaya política una joya que, según 'The Mirror', fue un regalo de bodas de Nizam de Hyderabad, un rey indio, en noviembre de 1947 acompañada de una tiara de diamantes y perlas y cuyo precio, como bien podréis imaginar, es incalculable. Para que os hagáis una idea, solo el diamante del centro podría sacarnos a toda la revista de pobres hasta que nos metan bajo tierra...
Vía | Divinity Foto | Gtres En Poprosa | Así cualquiera se va "de Rodríguez" ¿Verdad que sí Kate Middleton? En Poprosa | Kate, te paso un rato al niño, que así no hay quien pueda con la Play
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