Lección número uno si quieres coger un avión: Hay que llevar tarjeta de embarque. Todos lo tenemos claro ¿No? Pues mira cari, no, Kate Moss, a estas alturas de la vida, no lo sabe, y se ha presentado en un aeropuerto, sin tarjeta de embarque, y pretendiendo coger un avión. Claro que este despiste tiene una explicación...
Resulta que Kate Moss debió tener un buen día de fiesta (o un mal día de esos de beber para olvidar) y se puso más pedo que Alfredo. Con su cogorza en pleno auge, se plantó en el aeropuerto de Turquía e intentó colarse en un avión de bajo coste que viajaba a Londres. ¡Kate cari que el alcohol no puede sustituir, nunca nunca, a un billete de avión!
Pues resulta que la modelo, en un ataque de divismo total, consiguió con su insistencia montar en el avión. ¡Con dos ovarios! Claro que para ello provocó un retraso de dos horas en la salida del avión que, como podéis imaginar, provocó la indignación de todos los pasajeros. Vamos, que seguro que las personas que viajaron en ese vuelo fans, lo que se dice fans, de Kate, no lo van a ser nunca. Vaya escenita guapa...
Vía | Bekia
Foto | Rimmel
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