Lo de la familia LaBeouf cuanto menos es peculiar. El patriarca del clan, Jeffrey LaBeouf, tiene gustos muy raros en cuanto a moradas se trata y por ello, hasta hace bien poco, vivía en una tienda de campaña al más puro estilo Indio Apache. Sin embargo con la llegada del frío, su solidario hijo le abrió las puertas de su casa. Al parecer no es que se lleven a las mil maravillas ya que, según afirma el propio Shia, discuten continuamente por cosas tan cotidianas como la pasta de dientes, la limpieza de los baños, la compra,... Y como todo eso hace que se convierta en una casa de locos, la solución fue sencilla: que su padre se mudase al garaje.
A pesar de lo que muchos podamos pensar (aunque sé que otros estéis tomando ideas), papá LaBeouf está encantado con su nueva situación ya que pasado el frío, sigue en el garaje y no vuelve a su tienda, será que se acostumbró al lujo de las cuatro pareces. De todas formas, está claro que a grandes males grandes remedios. ¿Será una venganza de Shia por el nombre que le pusieron sus progenitores? Eso nunca lo sabremos...
Vía | The Superficial