Estas cosas me parecen fatal. Es más, deberían estar prohibidas. Que Miranda Kerr aparezca en la portada de Vogue Korea perfecta a pesar de salir con una braga-faja de cintura Julián Muñoz de color gris. Me pongo yo eso y parezco salida de un desfile de ropa interior de un geriátrico, pero claro, ella va y sólo se pone una cazadora encima de las lolas y está estupenda. Será puñetera.
Ay de verdad que me está empezando a caer mal esta chica a pesar de de que hace todo lo imposible por ser adorable, pero es que reina, Miranda, lo que no se puede es tener un novio perfecto, un hijo perfecto y estar perfecta siempre, ya sea de gala, de desfile de Victoria's Secret, de portada en ropa interior viejuna o saliendo a comprar el pan. No sé, ponte unos vaqueros que te flojeen alguna vez, o que te cojan sacando un paluego para convencernos de que eres de verdad y no sólo un holograma.
Es que más la miro y más se me hierve la sangre, ahí con el pelo remojado, aparentemente sin maquillaje, sin complementos... y sin una puñetera cosa fuera de sitio o que sobre. Eso se lo pone cualquier persona humana y sí, le sujetaría las carnes como a la Kim Kardashian de antes, pero saldríamos con cara de higo o a y b son ciertas. Chica de verdad, qué grima ser tan perfecto.
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