Hay artistas que nos sorprenden en los escenarios con modelitos imposibles, las que prefieren sorprender en todas sus facetas, luego otras se ponen lo primero que pillan y luego las hay que sin quererlo ni beberlo (o un poco queriendo sí), nos dejan ver más allá de lo que tapa la ropa (o al menos la primera capa)... Y así le ha pasado a Lana del Rey en su último concierto.
Ella que quería ir de recatada y que hasta pone postura recatada, de nada le ha servido porque al agacharse en plena canción los que estaban debajo, incluido un paparazzi muy hábil, le vieron toda la pora interior. Pero no era de esa que se deja ver como otras celebrities, sino unas braguitas blancas de toda la vida. Al menos nos nos lleva la clásica braga faja al estilo Taylor Swift... ¿o casi hubiese sido mejor?
Claro, que también os digo, que si no fuese por cosas así de Lana del Rey ya nos acordaríamos poco, con lo que prometía esta chica y el poco juego que al final nos está dando.
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