Parece ser que el talento artístico tiene extraños efectos secundarios. No es la primera vez que sucede. Uno de esos efectos es el de creerse el ombligo del mundo. Y esa es precisamente la enfermedad que parece que padece Kevin Spacey, un exacerbado ombliguismo. Kevin esta promocionando "Recount" una TV Movie que ha protagonizado para la HBO, y parece que la cuadrilla de colaboradores que lleva a cuestas esta haciendo la promoción algo complicada.
La cuadrilla que arrastra el tío se compone de: varios guardaespaldas, o así se hacen llamar ahora, que al Spacey le gustan los chulazos más que a Britney unas extensiones; varios publicistas, que supongo le apuntaran las respuestas más ingeniosas para las entrevistas que concede; un maquillador, porque un grano sobreactua en cámara y una ojera desmerece; un peluquero, que debe ser el que más se aburre de todos, vista la mata de pelo que luce el actor; y un estilista que le asesora en cuestiones textiles, vamos que le dice si ponerse el traje negro, el gris o el tostado que es tendencia. En fin, que con tres más como éste llegamos al pleno empleo.
Vía | Socialite Life