Drama al canto, poproseros, se veía venir a la legua que tarde o temprano que Demi Moore la iba a liar. La actriz está pasando por momentos malos no, lo siguiente, desde que se separó de su Ashton Kutcher. Así su bajada de peso ha sido más que comentada porque hay que reconocer que se está quedando en el pellejo la muchacha, pero lo peor estaba por venir… Y es que ha sido hospitalizada…
Pues sí, seguimos con las malas noticias, nos estamos volviendo de un gris que a este paso vamos a tener que eliminar color del diseño del blog porque qué cruz. Pero pobre Demi Moore, las cosas como son. Al parecer, según parece, el pasado lunes tuvieron que ir los médicos a su casa tras recibir una llamada en su servicio de emergencias. Una vez allí la atendieron durante media hora y decidieron trasladarla al hospital .
Claro que ahora vienen las explicaciones que, como podéis imaginar las hay para todos los gustos, así que agarraos que vienen curvas. Según el representante de la actriz fue por cansancio, las tensiones del momento y ese tipo de cosas para quedar bien que ellos dicen, que para eso se les paga. Sin embargo, las malas lenguas (y las que desgraciadamente me creo) apuntan a un “abuso de sustancias” y que necesitaría hasta ayuda profesional. Vamos que esto huele más a rehabilitación que lo de LiLo…
Sea como fuere esperemos que recuperes pronto, cari, que el mal de amores hay que dejarlo de lado y centrarse en lo que está por venir.
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Foto | Facebook de Demi Moore
Vía | US Magazine
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