Beyoncé, o como pasar de ir divina a horrible en cuestión de un par de fotos

Me vais a perdonar el atrevimiento, poproseros, pero hoy tengo que criticar a Beyoncé y esos vestuarios que se nos pone a veces, que no se puede ser más hortera. Si arriba la tenemos con un vestido divino, aunque con un escote un tanto exagerado y los pechos casi fuera, puede pasar de ir así de mona a ir horrenda en cuestión de minutos instagrameros.

Para celebrar el cumple de Blue Ivy, Beyoncé y Jay-Z alquilaron el parque natural Jungle Island de Miami, e hicieron muchas fiestas. Por eso pasó de vestido largo a ropa deportiva con medias negras brillantes, que no hay cosa que más me espante. Encima es que lleva unas raíces ultimamente y un rubio de pelo que le hace falta un buen baño de color, no me digáis que no.

Sin palabras me quedo ya con el modelo ascensor, y mira que me parece espectacular toda ella eh, pero es que así no se puede ir por la vida... Si hasta las uñas, así naranjas. Miedito.

Y lo mismo con esta estampa familiar y esos modelos que me llevan los dos, todos enjoyados y llenos de cadenas, qué horror de los horrores...

Y he aquí el modelo para actuar en el cumpleaños de Obama, que no me disgusta porque hay que tener en cuenta que es una actuación pero... de corto, le llega bastante. Claro que ella se lo puede permitir, eso no vamos a discutirlo de ninguna de las maneras.