Cada uno con sus vicios, y uno de los nuestros es echar las horas en portales de pisos como Idealista. Y fíjate que estábamos matando por ahí el tiempo cuando, ¡oh, sorpresa! ¿Quién pone su pisito en alquiler? Efectivamente: Iker Casillas y Sara Carbonero.
Con su regreso a España estamos más perdidos que un Gremlin en un Aquapark. Hace unos días ya saltaron las alarmas porque Iker Casillas había comprado a su nombre un pisito de 3 millones de euros en el centro de Madrid.
Desde entonces han aumentado los rumores de que la relación está pasando por un bachecillo. Aun así ellos se han empeñado, en varias ocasiones, en mostrarnos que su amor sigue como el primer día y están pasando las vacaciones en familia en el pueblo de Iker.
La casa que alquilan se encuentra en La Finca, una urbanización de Madrid más exclusiva que los caja roja de Nestlé. La casa, que compraron por 2,5 millones de euros (chatarrilla), fue su residencia antes de marcharse a Oporto.
Por lo que se ve los planes de Iker Casillas y Sara Carbonero se truncaron un poquito, porque su primera idea era vender la casa. Para ello hicieron una reforma que hizo que el precio de venta ascendiera a 4.900.000 euros. Con esta ganga, ¿alguien puede explicarnos por qué no la consiguieron vender? Aunque bueno, lo que saquen del alquiler para la guarde de los niños.
¿Y ahora qué? ¿Irá la familia a vivir al piso que compró Iker en el centro de Madrid? ¿O les espera un futuro más truncado?
La casa tiene seis habitaciones con baño, gimnasio y spa, dos piscinas (una interior y otra exterior), jardín con porche, dos salones, habitación de juegos a tamaño Chiquipark y una cocina más grande que el campo del Real Madrid.