Hay cosas que ya no pintan bien desde el principio, y eso es lo que ha pasado con el extraño invento de Mediaset 'Quiero ser' en el que Sara Carbonero accedió a participar tan feliz de la vida. Ha durado menos que un telediario, poproseros, y no creo que esté nada contenta la mamá de Martín con su 'fracaso' en la vuelta a la tele. Porque sí, lo pinten como lo pinten esto es un patinazo gordo. Que no se cancela eh, pero que en tres días lo muevan a Divinity viene siendo lo mismo casi.
La audiencia ha sido muy baja desde el primer día y de las críticas recibidas desde el minuto uno ya mejor ni hablamos, que debe estar Sara que preferirá no meter mucho la nariz en redes sociales.
Que ella mucho no aparecía por el momento, era como un fantasmilla, que cualquiera diría que era 'su nuevo proyecto'.
A mí, que confieso vi bastante poco del invento este porque gracia ninguna, me recordaba a una mezcla terrible entre 'Super Modelo' y 'Cámbiame', con el añadido de que los participantes eran chungos criticones y a las horas ya estaban arrancándose los ojos.
La idea de que "se busca al influencer más prometedor de España" ya decía mucho del programa en sí. ¿No os parece? ¿Algún fan en la sala que nos pueda argumentar algo a favor de 'Quiero ser'?
El tema es que como Mediaset tenía la idea en la cabeza de que el proyecto le durara más allá del verano pues ahí seguirá unas semanitas más... pero en Divinity, donde los responsables de la cadena consideran que puede encajar más con el público. ¿Sobrevivirá en su nueva ubicación o se cancelará en nada?
Y hombre, yo no sé, pero que nos cuente Dulceida que llevaba un año en el proyecto... vaya tela.
Vía | Telecinco
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En ¡Vaya Tele! | 'Quiero ser', ¿y Sara Carbonero?
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