Kylie Minogue empezó ayudando en el bar del padre de Andrés Velencoso, en la costa Brava y al final parece ser que le han gustado tanto las playas catalanas y su cristalina agua que, sin dudarlo, se ha comprado un chalet ahí cerquita, para tener a toda la familia controlada.
Estuvo mirando por toda la zona en general y al final se encaprichó de un chaletito (menudo chalet, ya os lo podéis imaginar…) en plena Costa Brava, concretamente en el municipio de Tossa de Mar, en Girona. El precio final de la casa han sido nada más y nada menos que 472.000 euros.
Y lo más curioso de todo esto, es el motivo por el que lo ha hecho.
Al parecer, según ha confesado una fuente cercana a Kylie a algunos periódicos británicos:
“Andrés siempre había sido considerado como el que se haría cargo del negocio pero últimamente ha estado muy ocupado con su carrera como modelo. Éste se siente muy culpable por no ayudar más a sus padres. Comprando una casa en Tossa de Mar Kylie muestra lo segura que está de su relación con él.”
Vamos, que quiere matar dos pájaros de un tiro: darle la seguridad a Andrés de que la cosa va en serio y además se nos viene a las costas, se pone morenita, tiene tapas gratis en el bar del suegro y éstos, encantados de que la muchacha se venga a ayudarles y encima le publiciten de manera gratuita el bar (que ha duplicado el número de ventas estos últimos meses).
¡Si es que es un solete nuestra Kylie Minogue, madre!
Vía | 20 minutos
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