Yo cada día estoy más de acuerdo en que la crisis solo afecta a los que no tienen pelas porque, vamos, yo me acuerdo que cuando era mi cumpleaños, mi madre o bien me daba dinero para irme al parque de atracciones con mis amigos o hacíamos fiesta en casa, y ya de más mayor, nos íbamos de copas por ahí pero, creo que en ningún momento se me ocurriría, el día que me case, alquilar una isla privada para mi y mi pareja y montarnos ahí nuestro décimo aniversario de boda con toca clase de lujos y comodidades propias de un rey más que de un mortal simple y común (que los reyes también son mortales, todo sea dicho).
Eso es lo que ha hecho el matrimonio Beckham. Han querido celebrar su 10 aniversario a lo grande y pensaron: ¿un crucero? no, demasiado común, ¿una cena en un buen restaurante? que va, que va, eso es de gente corriente... entonces a la posh se le ocurrió la magnífica idea (no sé realmente si fue ella pero, la pega la verdad) de celebrarlo en una isla privada para los dos. Y así lo van a hacer.
David ha decidido alquilar pues nada más y nada menos que una isla privada para celebrar allí que han pasado 10 años (10 años aguatándose ya...) desde que se dieron el sí el 4 de julio de 1999 en el castillo de Luttrellstown en Dublín. Ahora es cuando yo os digo la isla de la que se han encaprichado aunque, sed realistas, no vais a poder verles allí disfrutando de su aniversario.
Es una de las islas del archipiélago de las Islas Vírgenes Británicas, propiedad privada de Sir Richard Branson, presidente del Grupo Virgin,(ya veis con quienes se codean aquí los amigos, que no es moco de pavo) y el encima va a ser maestro de ceremonias; es decir, va a ser el encargado de que a la pareja, mientras permanezcan en la isla, no les falte nada de nada.
Y como David y Victoria comentaron hace un par de días que tenían ganas de aumentar la familia... ¿no será este el sitio elegido para ello?
Vía | Famoshion
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