Vaya pedazo de número se ha marcado la revista Vogue en su edición francesa, poproseros, vaya cantidad de caras conocidas a cada cual más famosa. Tres portadas de excepción, ni más ni menos, pero eso sí, todas ellas con un denominador común: Penélope Cruz.
Sí, por una parte tenemos a la Alcobendas posando con alguna de las grandes actrices hollywoodienses del momento, Meryl Streep, Julianne Moore, Gwyneth Paltrow, Naomi Watts y Kate Winslet (ojito al tremendo photoshop que lleva encima esta última que casi ni se la conoce…). Todo un lujazo para el espectador, qué duda cabe. Una imagen en blanco y negro para este especial en el que Pe ejerce de maestra de ceremonias. Y es que su fama le precede y, le pese a quien le pese, es una de las que más brilla en el firmamento de las celebrities.
Esa portada me gusta bastante, pero creo que me quedo con otra de ellas junto a Bono, el cantante de U2, aunque la que protagoniza sólo con Meryl tampoco tiene desperdicio. La verdad es que ha sido una gran edición, totalmente de enhorabuena a Vogue.
Lujo, lujo. Y es que ahí donde lo veis ha sido la propia Pe la que ha organizado todo el tinglado, la revista le dio bastante libertad y ella hizo el resto, todo ello para hacer un número especial en el que señalar el trabajo solidario que RED hace en África. Pues más mérito, todavía.
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