En las últimas horas todas las conversaciones parecen girar alrededor de 'Operación Triunfo'. Por una parte, la trágica noticia que nos ha golpeado a todos sobre el fallecimiento del exconcursante Álex Casademunt; por otro lado, Soraya se ha sincerado como nunca sobre qué supuso para ella el paso por el concurso.
Lo ha hecho en el programa de Youtube de entrevistas 'Pilar & Friends', protagonizado por la soprano, compositora y directora de orquesta Pilar Jurado.
Soraya Arnelas ha sido su última invitada para charlar con ella. Y, cómo no, tenían que hablar del momento que le cambió la vida: su ingreso en 'OT' en el año 2005. Y esos recuerdos la han llevado a sincerarse sobre uno de los momentos más duros que ha vivido.
"Por aquel entonces yo tenía una pareja que era de todo, menos buena persona", comenzaba contando. "Era un tipo bastante nocivo, un tipo que me maltrataba psicológicamente y físicamente", añadía.
Tras ver un anuncio del casting para el concurso, y después de mucho pensárselo, finalmente decidió presentarse. "Me cambió la vida", asegura.
"Me agarré a la oportunidad, porque si yo no me iba a ese casting y no me metía en eso, no sé cómo hubiese terminado hoy en día", comenta.
"Yo fui una mujer maltratada físicamente y psicológicamente, lo que pasa es que nunca lo conté. Quizás ahora, después de tantos años, no me apetece hablar de ello, pero lo cuento como parte del proceso de evolución que he tenido. Para que la gente sepa cómo soy, quién soy, por qué he llegado hasta aquí, cómo soy...", explica. A lo que añade: "A mí la música me salva de estar viviendo con una persona que no me hacía nada de bien".
Su marcha a Madrid
También ha aprovechado para recordar cómo, años antes, sus comienzos en el mundo del faranduleo y las artes no fueron fáciles. Con 17 años abandonó su pueblo (Valencia de Alcántara, Cáceres) para irse a Madrid y probar suerte como actriz en la escuela de interpretación de Cristina Rota.
No consiguió superar la prueba de acceso. "Mi madre me dice: 'Somos humildes. No tenemos dinero para que te quedes un año en Madrid. O te quedas y te pagas tus gastos o te vuelves al pueblo'. Y yo dije: ‘Todo, menos volver'", recuerda.
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