Hoy es miércoles, el día sagrado del cancaneo. El único día que te puedes levantar con el '¡Hola!' calentito y recién salido de la rotativa del salseo mientras que tu cafetera prepara cafeína en cantidades industriales para poder aguantar hasta las tres de la mañana de hoy viendo la docuserie de Rocío Carrasco.
Como ya es habitual, Ro Flores, en vísperas del documental, se ha hecho lo que ya se conoce como un Paloma García-Pelayo (mirar con dramatismo a la cámara para soltar una bomba) desde el sofá del club social de 'El Programa de Ana Rosa'.
La influencer conocida como Rotrece le ha pedido a su madre que se deje de recortes. A la hija de la Carrasco no le ha sentado muy bien que se hayan eliminado 11 minutos íntegros donde Rocío contaba la verdad sobre su hija, que casi le deja sin vida por la paliza que un 27 de junio de 2012 le propinó, según ratifica la sentencia del Juzgado de Menores Nº4 de Madrid.
Rocío ha puesto en cuarentena (que está muy de moda) junto a su jefa Anne Rose, la mentora de la cantera de 'las hijas de' como colaboradoras, las buenas intenciones de su madre:
"Cuando tú quieres proteger a tu hija, lo primero, tú no haces un episodio hablando de ella, por lo tanto, lo de la protección lo pongo en duda", comentaba esta misma mañana la reina de las Flores olvidando quizás que su padre se reunió con 'Sábado Deluxe' para contarlo él mismo por 60.000 euros.
Ro ha hecho un llamamiento a 'La Fábrica de la Tele' y a Paolo Vasile, que debe estar decidiendo qué hacer del mismo modo que lo hacen todos los empresarios: "si encesto la bolita de papel, lo emito".
"Pido desde aquí a los responsables del documental y de la cadena que emitáis el capítulo completo, yo quiero escuchar el testimonio completo de mi madre. Quiero saber qué es lo que dice, cómo lo dice, etc. Tengo todo el derecho del mundo", decía tajante Rocío Flores casi poniéndose de rodillas.
'La niña' (que se beberá una Pinta y le rezará a Santa María cada miércoles noche mientras que ve la serie documental) desconfía al 100% de las intenciones de su madre:
"Me parece irónico porque se dice que Rocío Carrasco ha levantado teléfonos para que ese tema no saliese, pero ahora es ella la que se sienta con sentencia en mano a hablar de eso", recriminaba contra la credibilidad de su madre, a la que ha llamado por primera vez por su nombre, en la docuserie.
Pero Rocío hija (o nieta, depende de cómo se mire) tenía cartas hasta para el apuntador. Le ha faltado pedirle al estilista que le cambie de traje y de peinado a su madre, que el fucsia ya le aburre y el pelo a lo Jessica Rabbit no va con sus ojos:
"Al equipo médico que la lleva me gustaría decirles que porqué le recomiendan que no hable conmigo pero sí que cuente esto delante de cuatro millones de espectadores...", comenzaba cuestionando a los médicos tirando del mismo argumento que su jefa.
Además, ya que estaba en este mood de 'Salud Responde', Rocío ha querido saber si que su madre haya cortado la relación con su hijo David también está recetado por ellos: "¿Mi hermano también está metido en mi pack? ¿Ni una llamada por un cumpleaños en siete años ni por su estado de salud?", se dirigía directamente al equipo de especialistas que está tratando con su madre.
Ro Flores ha insistido en que quiere ver qué contó exactamente su madre con respecto al episodio de su agresión: "Me parece muy cuestionable que se decida ocultar justamente ahora un testimonio que lleva grabado un año", ha dicho ante la atenta mirada de Ana Rosa la institutriz.
"No tengo miedo a nada, tuve miedo hace muchos años por otras circunstancias que no son este episodio. Sé muy bien lo que yo he vivido en esa casa y ahí me quedo. Esa es su verdad", ha zanjado en esta última intervención previa a que se reanude 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' tras la entrevista en directo de la semana pasada.