Se está liando, Paco. La guerra más cruenta (y dulce) ha llegado a los pasillos de nuestros supermercados de confianza y a nuestros estómagos sin que apenas nos hayamos dado cuenta. Nunca un debate gastronómico había dividido tanto a la sociedad desde el clásico derbi tortilla de patatas con cebolla VS sin cebolla.
El nutricionista instagramer Carlos Ríos (el realfooder) se ha lanzado al mercado ecológico, liderado actualmente por 'Los Sabores de la Esteban' (como todo el mundo sabe), proponiendo una alternativa saludable a la Nutella y a la Nocilla para rellenar las mediasnoches en los cumpleaños más costumbristas. Sin embargo, el influencer (en el sentido más lógico de su palabra) se ha topado con una mano negra (bueno, marrón en este caso) con la que no contaba a pesar de su amplio bagaje en redes sociales: la de los haters.
Aunque parezca difícil creerlo, hay nutricionistas que se han echado encima del realfooder por haber sacado al mercado una marca de crema de cacao que compita directamente contra las míticas de gordeo en los estantes de los Alcampos de España. Lo que Carlos Ríos define como una auténtica "revolución en nuestro sistema alimentario", otros se han atrevido a calificar este nuevo producto de la marca 'Taste Shukran' como "nada saludable" e incluso de engañoso. Acompáñame (una noche más) a repasar esta trágica historia que emocionaría incluso a Alberto Chicote, el Steven Spielberg de la comida.
Así es la crema de cacao Realfood
Carlos ha sido siempre uno de los defensores acérrimos de la cara buena del cacao. Sin embargo, los "Ríos" y ríos de aceite de palma y las cantidades industriales de azúcar que componen las cremas de las principales marcas hacen que los beneficios del chocolate puro y duro (protección frente al sol, su efecto analgésico, sus antioxidantes o lo positivo que puede resultar para el corazón) se vean mermados por otros efectos negativos en nuestra salud que, por desgracia, todos conocemos.
Es por eso que el instagramer realfooder ha dado un paso al frente para ofrecer la posibilidad de no tener que renunciar a un capricho dulce sin que eso suponga un cataclismo en nuestro organismo.
La crema de cacao de Carlos Ríos promete concentrar en sus envases de 200g mucho más sabor que "las típicas cremas ultraprocesadas" y tan solo 80 kcal, 6 gramos de grasas, 25,1 gramos de hidratos de carbono de los cuales 16,7 gramos de azúcares, 5,5 gramos de fibra, 3,3 gramos de proteínas y 0,13 gramos de sal en cada 100 gramos de producto. Y todo tan solo por un euro más de lo que cuesta la Nutella o la Nocilla (a 2,99 euros).
¡Manos arriba! ¡Esto es un atracón "de azúcar"! Negacionistas de la crema Realfooder
Algunos expertos se han mostrado muy contrarios a este nuevo producto ya que, según indican, tiene un etiquetado engañoso y Carlos Ríos ha aprovechado para recomendar ingestas poco saludables de esta crema de cacao: "Atribuye propiedades y recomienda gramajes irresponsables de la crema, además, ha atacado a la profesionalidad de compañeras de profesión", ha compartido el dietista-nutricionista y tecnólogo alimentario del Centro de Nutrición Aleris, Aitor Sánchez García.
Según ha declarado la tecnóloga y divulgadora científica Beatriz Robles en 'Consumidor Global' “que lleve dátiles, en vez de azúcar, no quiere decir que sea bueno, en realidad es menos malo que las tradicionales, pero sigue siendo un producto de consumo ocasional que equivale a las cremas de cacao ultraprocesadas”.
Es más, algunos indican que Carlos se habría saltado a la torera la normativa del etiquetado de los productos ya que, según el reglamento europeo, “cuando aparece una representación gráfica en el packaging se debe señalar en el etiquetado en qué cantidad está dicho componente en la mezcla final”.
Atendiendo a esta regla, se ve que en el caso de la crema de Ríos, en el paquete aparecen las especificaciones de "sin azúcares añadidos y sin edulcorantes", además del porcentaje de castañas y cacao que contiene, pero no el de los polémicos dátiles.
Como podéis ver, este lanzamiento ha provocado un simposio de nutricionistas que creen que Carlos Ríos posee una "legión" de followers que confían plenamente en su criterio, razón por la que consideran que el instagramer debería haber sido más riguroso al menos en el empaquetado y en las recomendaciones de consumo, atendiendo a la ley 1169/2011 del Parlamento Europeo.
¿Conspiración o conspiranoia?
La respuesta de Carlos Ríos a este boicot a su producto ha sido más que contundente, guerrillera diría yo. El influencer ha hecho partícipe a sus followers de las denuncias que le han llegado por parte de medios de comunicación acerca de la ilegalidad del etiquetado de la dichosita crema de cacao. El nutricionista ha intercalado memes con ataques directos a las grandes marcas en sus instastories, pero en el feed de su perfil de Instagram ha declarado el inicio de la contienda Realfood VS marcas de ultraprocesados.
El realfooder ha calificado de "mafia" a la industria que, según él, ha utilizado el típico argumento de "no diferenciar la calidad de los productos". Carlos Ríos se niega a que cosifiquen al dátil como un simple endulzante cuando es mucho más que eso, ¡no seamos dulceteros básicos, por favor! El maestro chocolatero ha asegurado que "quieren tumbar el producto apoyándose en resquicios legales que no están basados en evidencias científicas".
Pero, si tantos beneficios tiene el dátil, ¿no sería más fácil añadir un renglón más en la etiqueta del producto y darles con un puntito en la boca? Pues parece ser que no porque quien cede en la guerra, pierde... No lo digo yo, lo dicen los entrenadores de fútbol en las ruedas de prensa mientras que mascan chicles de Hacendado (por muy poco healthy que sea eso).