La tensión en la familia Pantoja, tras que esta luz la entrevista de Kiko en 'Lecturas' viera la luz esta mañana, es mayor que la de las sábanas de una cama de hotel hecha. Y es que Mila Ximénez sabe mejor que nadie sonsacar la información más jugosita (poco hecha, carnaza) al hijo de la tonadillera. Entre otros muchos titulares, el DJ ha contado qué sabe del encuentro entre su madre y Chabelita, que tuvo que saltar la valla para poder verla.
Kiko Rivera ha desvelado que solamente tres personas, tres seleccionadas minuciosamente para ser tributos en estos 'Juegos del Hambre', han podido acceder al interior de Cantora para tener una vista con Doña Isabel Pantoja, la 'Drama Queen': su hermana Isa Pantoja, su prima Anabel panto-sexy y una amiga de la familia. "Las dos primeras me dicen que está de puta madre, pero más delgada, que es normal. La tercera me dice que está fatal", aseguraba el pequeño del alma con la piel de canela (tatuada).
No obstante, tan solo una línea más abajo de su extensa entrevista (que vamos desglosando por fascículos, como buenos coleccionistas del salseo pantojil) el entrevistado por Mala Mila Leche Ximénez se contradice y matiza que su hermana "salió traumatizada" de Cantora, quizás porque se encontró a su madre empapelada hasta las cejas de décimos de lotería, quién sabe.
Otro párrafo más abajo, el DJ vuelve a cambiar de opinión: "A mí me ha dicho que la veía bien. Físicamente jodida, que está con sus gatitos (como buena señora viudo-normativa, vaya). ¡Que la veía con sus cojones de toda la vida de Dios! ¡Como es ella!", ha añadido Kiko reconociendo que cree que se hizo la digna tanto con su hermana (a la que no quería abrir la puerta) como con Anabel Pantoja.
Rivera cree que su hermana no le ha contado el contenido de la conversación que tuvo con su madre por no hacerle daño, solo sabe que cuando la Pantoja hablaba (bueno, que ella no habla, sino que sentencia) de su fatídica situación familiar, se refería a Kiko como "ese". En el momento en que Isa le confesó este detalle, se echó a llorar: "Quedamos para comer y no pudo terminar de contarme, se echó a llorar [...] 'No llores, vamos a comernos el cochinillo', dije" ha relatado el hermano, que siempre mira por la comida. Porque descartamos que con "cochinillo" se refirieran a Agustín Pantoja, ¿no?
Kiko también ha insistido en lo mucho que le dolió que su hermana tuviera que saltar la valla (y no la rana) para entrar en la que hasta hace nada era su propia casa. El hijo de la tonadillera le ha contado a Mila que su hermana le contó que había un coche en la puerta, que era del "tiparraco" (así llama ahora a tito Agustín): "Él antes no era así o , por lo menos, lo ocultaba. Ha sido mi padre, le he contado todos mis secretos. Ahora da mucha pena estar a su lado", ha asegurado.
Fotos | GTres