Al igual que el gordeo terracero en España es estacional (en invierno, chocolate con churros, y en verano, heladitos) el salseo telecinquero también lo es: cuando no se está hablando de Rocío Carrasco y sucedáneos, se habla de la Pantoja y los suyos. Es por eso que Telecinco ha considerado de obligado cumplimento que si la hija de la Jurado tenía su propia docuserie, alguien del clan Cantora tenía que empezar a dar la cara en un formato del estilo. Y quién mejor que el exalcalde corrupto Julián Muñoz para romper la veda del Caso Malaya 17 años después de que explotara en mitad de Marbella.
Las confesiones de Julián Muñoz en los dos primeros capítulos de 'No es la hora de la venganza, es la hora de la verdad' nos han dejado de pasta de boniato, con los pantalones por los tobillos (y mira que en su caso, al llevarlos tan altos, tienen mayor caída).
El ex presidiario no sólo ha sacado a la luz las cartas que le escribía a la Pantoja en la cárcel, sino que también ha mostrado su diario y ha calificado su amor por Isabel como "una obsesión", llegando a acusarla de haberle hecho un amarre (o "hechizo") para dejarlo prendado.
Cabe recordar que Julián podría ser considerado como el primate de los concursantes de 'La Isla de las Tentaciones' ya que puso los cuernos a su mujer Mayte Zaldívar con su tentadora favorita, la tonadillera más famosa de nuestro país. Muñoz rompió su relación de 25 años con la que era su esposa y la madre de sus hijas por lo obnubilado que se quedó con la Isabel Pantoja artista: "Me he portado mal, he sido un perro", ha reconocido en un ejercicio de autocrítica.
El doble de acción de Mauricio Colmenero ('Aída') ha confirmado lo que ya todos sabíamos: que el inicio de su relación con Isabel se solapó con su matrimonio, algo que ambos negaron hasta la saciedad infiel y amante (¡Ups! ¿de qué me suena, Antonio David?). El expolítico llegó a dar una rueda de prensa negando su divorcio de Mayte cuando ya se acostaba con la Pantoja:
"Me parece doloroso y poco agradable o nada agradable. Veo a Mayte y en ese momento Isabel Pantoja y yo ya teníamos una conexión... Solo hay que ver su cara. Mayte en ese momento ya era una mujer traicionada", ha recordado con sentimiento de culpabilidad Julián en su entrevista con Paloma García-Pelayo y Santi Acosta.
Un Julián avergonzado y preso de su pasado
El retrato de un Julián putero, facha y de los del taco (de billetes en el bolsillo) parece haberse difuminado con su arrepentimiento, ahora que parece más Steve Urkel envejecido que el sheriff de Marbella que fue en su día:
"Hoy me avergüenzo de esto, me produce vergüenza y dolor. El único culpable era yo, Mayte no tenía nada que ver ni culpa, e Isabel Pantoja estaba en el juego conmigo. En ese momento no quise ver nada y las consecuencias fueron terribles por el daño que hice a mi gente", ha confesado roto de dolor.
A modo de conclusión, Muñoz reconoce que no debería haberse gastado los dinerales en sus regalos y viajes junto a Isabel Pantoja y haberle dedicado más tiempo a su familia, especialmente a las dos hijas que comparte con Mayte: "Tenía que haber sido más hombre. No más macho, más hombre", reflexionaba sin poder evitar llenar sus ojos de lágrimas.