El pasado 4 de abril el mundo de la actuación se llevó un varapalo tristísimo cuando se anunció el fallecimiento de Silvia Gambino. La actriz dijo adiós tras perder la batalla contra el fucking cáncer que padecía. Fue la expareja de esta, el productor Alberto Closas, el encargado de dar la mala nueva desde sus respectivas redes sociales y, según se dice/comenta/rumorea, lo hizo sin el consentimiento de los familiares de la artista.
Ha sido la hermana de la intérprete, Zoraida Gambino, la encargada de aclarar la situación en una entrevista para 'Jaleos' donde ha tachado al que fuera su cuñado de aprovecharse de la situación: "Ellos nunca estuvieron casados. Esa es otra información falsa. Y segundo, te puedo decir que nadie lo autorizó. Yo lo digo ahora porque ha pasado un poco de tiempo y, te repito, he seguido la voluntad de mi hermana, que no quería que nadie supiera nada sobre su enfermedad".
Zoraida ha dejado clarinete que su sister "No tenía ninguna relación con él [Closas] desde hacía años" y que este hizo pública la exclusiva sin contar ni con su opinión ni con la del resto de la family: "No sé quién le contó la noticia y por qué lo puso así en redes sociales, contando que tenía cáncer y todo. Es una cosa que mi hermana no quería contar y que tendría que haberla dicho la familia".
Además, Zoraida ha acusado al director de buscar beneficio de la triste pérdida para ganar publicidad: "Lo siento, pero no me gustó. Tengo que decirlo. Podría haberme escrito a mí un mensaje antes de hacerlo, que yo lo conozco", sentencia.