Miguel Bosé, desde hace unos meses, no solo está en boca de todo buen cincuentón y cincuentona de esos que están siempre tarareando sus canciones, sino de toda la población. Tanto el negacionismo de la utilidad de las mascarillas como el de la filiación de sus cuatro hijos con Nacho Palau han hecho que el artista haya caído en popularidad como un supermán en pleno vuelo con sobredosis de kriptonita, incluso para sus amigos más cercanos.
Mercedes Milá siempre ha presumido de tener una conexión superlativa con el hombre que siempre se pasa de la raya (empezando por la del ojo). Quizás, porque ambos son Aries, ya que el hijo de Luis Miguel Dominguín nació un 3 de abril y la presentadora morreadora de perros un 5 del mismo mes, o puede ser que se conocieran haciéndose el láser de los pelos en la lengua, pero lo cierto es que ya solo quedan cenizas de esa bonita amistad que les unía.
Así lo ha revelado la propia periodista en una entrevista que ha concedido a 'XL Semanal', donde, además de contar en primicia que adoptará a una rata, ha desvelado el porqué está tan desencantada con Bosé: "es un Miguel nuevo que no me interesa, es un Miguel con el que no me resulta fácil entenderme", ha sentenciado la que llevó 'Gran Hermano' a la gloria.
Milá no ha entrado en la batalla legal de Miguel Bosé con su ex, sino que se ha centrado en su postura de conspiranoico frente a la Covid-19: "lo llamé tras la primera de sus intervenciones para hacerle saber que algo de lo que estaba hablando no era cierto", ha verbalizado la mejor amiga de Scott (su perro) preocupada por la falta de veracidad de su discurso.
"Me contó el que iba a ser su recorrido con ese tema y, desde entonces, me separé mucho porque no estoy de acuerdo en absoluto con lo que está haciendo ni diciendo", ha dicho tajante Mercedes a pesar de ser la clon, la gemelier y compartir material genético (no tengo pruebas, tampoco dudas) con su hermana Lucía Dominguín.
Fotos | G Tres