La boda de Anabel Pantoja en 'La Graciosa' ha pasado de ser el potencial día más feliz de su vida a toda una pesadilla: no han podido pasar más desgracias en su entorno en las vísperas de su enlace con Omar 'El Negro'. La preparación ha sido de todo menos eso, 'graciosa'. A los trapos sucios que han ido sacando sistemáticamente en 'Sálvame' en estos días (supuestas infidelidades y mamarracheos del novio), la oposición de algunos isleños a que se asocie el nombre de la sobrinísima a sus playas, a una catástrofe natural próxima (la erupción del volcán de Cumbre Vieja), ahora hay que sumarle el triste fallecimiento de su abuela doña Ana.
Tal y como acaba de confirmar la revista '¡Hola!', Anabel Pantoja está tan destrozada por la muerte de su abuela Ana Martín, matriarca de Cantora, que ha decidido no continuar adelante con su boda, que se iba a celebrar el próximo viernes en la isla de su novio Omar Sánchez. La reina de la pantosensualidad ya no está nada body positive tras esta trágica pérdida y ni siquiera le apetece darse el sí quiero con el hombre de su vida en los próximos días sabiendo que su familia no está para celebraciones.
Anabel Pantoja el día que se despidió de 'Sálvame' para centrarse en los preparativos de la boda que no va a celebrar
Según ha informado 'El Español', la madre y fan número uno de Isabel Pantoja ha fallecido a sus 90 años esta misma mañana de miércoles (29 de agosto) tras unos días ingresada en un hospital de Cádiz. La nonagenaria recibió el alta para morir en el epicentro del salseo, Cantora, tal y como quería hacerlo después de despedirse de toda su familia, Anabel Pantoja entre muchos otros.
Doña Ana siempre ha sido la sombra de su hija Isabel
El estado de salud de doña Ana pendía de un hilo desde hace unos años. Mientras la Pantoja participaba en 'Supervivientes', corría el año 2019, la señora fue ingresada de urgencia por una fuerte gastroenteritis, la precuela del ictus que la sacudió meses después. La madre de Isabel tuvo que ser hospitalizada y, a las pocas horas, volvió a repetírsele. Tras 11 días de observación, la abuela de Kiko Rivera, Anabel e Isa Pantoja logró salir del hospital deseandito volver a probar el famoso pollo de su hija después de dos semanas comiendo las papillas que le traían las enfermeras.
Kiko Rivera y Anabel Pantoja junto a su abuela