El conde Lequio debería hacer caso a su exmujer Antonia Dell'Atte cuando decía eso de 'quédate en casa' durante la cuarentena. Después de cada uno de los episodios de 'Rocío, contar la verdad para seguir viva', el colaborador puritano italiano se ha dedicado a sacarle puntillita a todo lo que esta ha contado sobre Antonio David Flores.
Rocío Carrasco aprovechó, durante su entrevista en directo, que iba vestida de azul eléctrico para meterle unos cuantos voltios al nuevo compi de pupitre de su hija Rotrece en la clase de tertulianos de la seño Ana Rosa Quintana:
"Le diría que con la actitud que él ha tenido para conmigo y para con mi vida creo que no ha entendido nada. Creo que no se ha parado a ver ni una palabra ni una frase que yo haya dicho", comenzaba espetando Rociíto con el mismo aplomo y determinación con el que uno da una orden a Siri.
Rocío ha identificado el discurso de Lequio como propio de un Gemelier del "padre impío" del que tanto hemos oído hablar en la docuserie: "No me extraña en absoluto porque perro no come perro. Al final, si lo analizas, si tiene ese pensamiento que él verbaliza me demuestra que si no es igual 'al ser' (Antonio David), es muy parecido", argumentaba la Carrasco.
Esta misma mañana, y tras el plantón a la 'Fábrica de la Tele' al desestimar hacerle una pregunta a Rocío durante la entrevista de ayer, Alessandro Lequio ha respondido a las acusaciones de la hija de la Jurado en su programa:
"La que no me ha entendido es ella. Ha contado una versión de mi relato que en absoluto coincide con lo que yo he dicho, lo ha manipulado y retorcido presentándome como si yo fuera cómplice e igual que Antonio David cuando eso es rotundamente falso", ha verbalizado el Conde Vecchio (su discurso un poco "viejo" sí que es).
Es más, el colaborador senior de Ana Rosa no ha dudado en volver a dudar de la credibilidad de Rocío Carrasco por su situación vulnerable y de inestabilidad emocional:
"Soy consciente de que Rocío Carrasco es una mujer que no está bien y por eso creo que lo que dice hay que escucharlo con cierta caridad. No está bien acusar a alguien de un delito cuando no es verdad. Yo nunca he sido denunciado por maltrato y, por lo tanto, nunca he sido condenado", proseguía Alessandro arreglándolo todavía más (#ModoIroníaON).
Y, como no podía ser de otra manera, este libre pensador de la casta televisiva ha finiquitado su intervención con una reflexión de lo más platónica (pero, insisto) por su naturaleza antigua: "Piensa que los que no están con ella están en contra de ella y eso no es así. Yo nunca entenderé que una madre lleve nueve años sin querer ver a sus hijos, pero eso no quiere decir que Antonio David sea santo de mi devoción", ha concluido.