Nadie tenía fe en ellos y al final han durado la friolera de 7 años juntos. Todo comenzó con una jovencísima Laura Escanes de 19 años enamorada de un señor duro y arrogante de 40 al que consiguió ablandar su corazón, Risto Mejide. Con una hija en común y dejando atrás toda una relación de altibajos, Laura y Risto ya han empezado a recomponer sus vidas.
Tal y como ha podido fotografiar la revista 'Lecturas', Laura Escanes está buscando piso tras abandonar el domicilio familiar en el que vivía con Roma, su niña, y su ex. Y la influencer no está haciéndolo en bata, con un Colacao en la mano y refrescando la página de Idealista cada cinco minutos, no. Se ha puesto coqueta con 'C' para ir a visitar pisos de lujo.
Un día después de anunciar su ruptura con lo que ya conocemos como el modus operandi habitual de las rupturas famosiles (textito emotivo en una foto en blanco y negro en Instagram), Laura se desplazaba hasta uno de los barrios madrileños más exclusivos para buscar un nuevo hogar en la mejor compañía.
El amigo en cuestión que le ha echado una mano es Pablo Castellano, el marido de la también influencer y amiga de Laura, María Pombo. El influencer Cayetaner ha aportado a la Escanes sus conocimientos de arquitecto para ayudarla a escoger el piso que se adecúe mejor a las necesidades de una instagramer soltera: con su buen vestidor, terracita mona donde subir las fotos postureo de la tostada con aguacate por la mañana y buena luz para no joder los planos selfies.