Desde que Instagram nos deleitara con los nuevos canales de difusión, las celebridades made in Spain se valen de estos cual consulta de su terapeuta. Y unos servidores estamos encantadísimos. Prueba de ello es el último testimonio de nuestra adorada Lucía Sánchez. La joven actualmente mantiene una relación cordial con su ex Isaac Torres, padre de su hija Mía, pero no siempre fue así.
Estos Pimpinela de Telecinco han roto y han vuelto algo así como tropecientas veces desde que participaran en 'La isla de las tentaciones'. Pero, mientras el barcelonés tarda en rehacer su vida media milésima de segundo, a la gaditana le cuesta un poquito más. Así lo ha confesado Sánchez en la citada de social: "Os soy sincera, me viene superbién ir a este tipo de eventos (en referencia a la boda a la que fue invitada hace poco). Sobre todo, para quitarme las barreras mentales que tengo", comienza a decir.
"He hablado con hombres (de manera cordial y todo muy normal), pero me viene superbién para aprender a relacionarme de nuevo, ya que me he vuelto nula en cualquier tipo de relación con los hombres. Así, aunque sea, rompo la barrera de: 'Hola, ¿qué tal?, y poco más'", añade la amienemiga de Marina García.
Y es que para Lucía, esta primera toma de contacto ha sido súper importante ya que se volvió un "poco antisocial" tras lo de Torres: "Hoy me acuesto habiendo conseguido objetivos personales. Para mí, una conversación de cinco minutos, mirando a los ojos y sin agachar la cabeza y la mirada al suelo, es un paso gigante", sentencia.
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