Ya ha llovido lo suyo desde que el tórrido romance entre Bertín Osborne y Fabiola Martínez se fuera al garete. El cantante de rancheras, lejos de sumergirse en maratones de comedias romanticonas de Netflix y arramplar con las estanterías de bollería industrial del súper, como haría un ciudadano/a cualquiera que pasa por una ruptura, ha depositado toda su energía en el gym y los resultados son alucinantes.
Y es que no hay nada que le gustara más al presentador que los platitos de jamón y queso con los que engatusaba a sus invitados de 'Mi casa es la tuya'. Pero estos han desaparecido de la nevera del machote made in Spain y su dieta ha dado un giro de 180º.
Prueba de ello es la portada que Osborne ha capitaneado hoy miércoles 30 de noviembre para '¡Hola!' donde luce un espectacular cambio físico a sus 68 tacos.
Bertín Osborne, en portada - ¡Hola!
"Me propuse ponerme en forma hace cuatro o cinco meses. Adelgacé diez kilos y me mantengo (...). Al principio es un tema de fuerza de voluntad y, ahora, ya es un tema de hábito", confiesa Bertín, mostrándose cual abeja reina de la sala de máquinas del gimnasio que te observa con mirada de superioridad mientras levantas la mancuerna con menos peso.
"No hay nuevo Bertín, para nada. Soy y me moriré siendo el mismo de siempre. A mí no me han cambiado ni las circunstancias ni las situaciones de la vida", explica un humilde y turgente Osborne, dejando clarinete que se ha cerrado en banda al amor: "Volver a enamorarme ni me lo planteo. Ahora mismo no tengo necesidad ni ningún interés", sentencia.