Nos hemos convertido en unos paparazzis virtuales a la caza de todos los casoplones de los famosos. Hoy le ha tocado el turno a la presentadora y líder del petardeo nocturno más graciosa de la televisión, Lorena Castell, a la que podemos ver entre seman cada tarde en 'Zapeando' y los lunes por la noche en 'Masterchef Celebrity'. ¿Pero dónde pasa la catalana las dos horitas al día que no está en la tele?
Tras pasar un tiempo cual Heidi en el caspolón rural que parecía sacado de un anuncio de Casa Tarradellas, en verano de 2020 Lorena se muda a un luminoso piso en pleno centro de Madrid junto a su hijo Río, de 3 añitos, según la revista 'Semana'.
Aunque mantiene su casita a la que se refiere como 'El Campito'; Castell, su hijo y su chico, el actor Rubén Bernal hacen vida en la zona superior de un edificio con vistas a la Catedral de la Almudena de Madrid y una terraza de las que piden barbacoa y reuniones de amigos. Allí, Lorena desconecta sentada en su zona chill out de sillas y mesas de madera, con sus bombillas de colores y suelo de baldosa.
Uno de los espacios que más muestra Lorena en sus redes es el salón. Aparentemente amplio y luminoso, al ser contiguo a la terraza, Castell lo ha decorado en torno al sofá de tonos grises y los cojines tonos pastel.
En frente, hay un espejo blanco que marca la decoración minimalista con tonos neutros del espacio, gracias a la que resaltan las molduras verdes de las paredes, el suelo de azulejo hidráulico y las alfombras de pelo largo.
Puede que el lugar más divertido y que rompe más con esta decoración en el salón sea la mesa de comedor, situada junto a la puerta de la terraza. Una mesa de madera maciza que ha combinado con sillas de plástico amarillas y de terciopelo aguamarina con los acabados en dorado. Un espacio al que añade dos plantas, una como centro de mesa y otra más grande como esquinera.
La cocina se encuentra diferenciada del salón, muy pequeñita, pero práctica. Hace las veces de lugar de cocinado (fundamental para su preparación en 'Masterchef Celebrity 7') y de lavadero, ya que tiene la lavadora incorporada bajo el fregadero. También de botiquín, ya que vemos como sobre la misma hay varias baldas con todo lo necesario para hacer frente al carraspeo o un constipado tontorrón.
La habitación del peque
Sin duda alguna, donde más nota hay que coger es en la habitación de Río, el hijo de Lorena. Aquí la presentadora se lo ha currado muy mucho pensando, esencialmente, en la diversión y alegría del pequeño. El dormitorio cuenta con una pared forrada con un papel pintado de animales salvajes de lo más bonito. En el centro, una alfombra con motivos geométricos de sitintos tonos, predominando el amarillo, el negro y el gris.
Junto a esta pared que resalta toda la habitación, se sitúa la cama. Pequeñita, con una colcha amarilla de palmeras y con un cabecero de mimbre. Sobre ella, un montón de peluches, esencialmente animales. El resto de juguetes se reparten entre una zona de juegos dentro de la propia habitación y un baúl que normalmente está en el salón si nos fijamos en las historias de Lorena.