No nos engañemos: preferiríamos arrancarnos las uñas de ambas manos y ambos pies con unos alicates antes de que fuese lunes por la mañana. Pero siempre llega, amiga. El lunes por la mañana siempre está a la vuelta de la esquina esperándote, después del domingo, para metértela doblada. Y esto no hay café que lo remonte.
Cada uno tiene sus rutinas para empezar la semana. La nuestra, por ejemplo, es la de llorar y compadecernos de la vida que llevamos y de no ser ricos. La de Paula Echevarría, por ejemplo, es hacer deporte.
Así nos lo ha demostrado en su perfil de Instagram. Que se pone a entrenar un lunes a las 9:15 horas de la mañana y en ayunas. ¡¿Estamos locos o qué?! A nosotros nos haces esto y a los treinta segundos nos tienes en el suelo haciendo la estrellita.
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Qué forma de sufrir más tonta, de verdad. ¿Qué es lo siguiente para mantenerse sano y en forma? ¿Eh? ¿Sustituir los bollicaos por copitos de avena? ¡Venga, por favor!
Si es que la Echevarría no puede disfrutar haciendo esto. Solo hay que verle la cara. Que con esa expresión y esas manitas, parece que nos va a plantar un pino en mitad del parquet. Y nosotros no hemos sido los únicos que nos hemos percatado, porque sus seguidoras también...
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Claro que sí, Juan, las caras. Siempre las caras. Menos mal que la Echevarría tiene su gimnasio privado, porque ponte tú a hacer esto en un gimnasio lleno de personas. A ver si se te va a escapar un pedete... Que posibilidades hay muchas.
Foto de cabecera | GTRES