Melyssa Pinto llegó a nuestras vidas por dos razones. La primera, para enseñarnos a romper con el ex de turno y dejar a este al nivel del subsuelo sin deshacerte en lágrimas en el intento y, la segunda, a sacarle partido ha dicho dramita. Ya ha llovido desde que vimos a la tentada corriendo despavorida de villa a villa de 'LIDLT' dispuesta a cantarle las cuarenta al que fuera su churri, Tom Brusse.
Tras su paso por el reality más húmedo de la televisión, la concursante se volvió una asidua de los debates de cotilleo y, tal fue su dosis de intensidad y su capacidad de pasar del llanto a la alegría en cuestión de segundos, que le valió para hacer sus pinitos como actriz. Más concretamente, la colaboradora está grabado un cortometraje donde comparte trama y largas jornadas de rodaje con la mismísima Macarena Gómez.
Ahora, Melyssa ha hecho saltar todas las alarmas al publicar un story desde su cuenta de Instagram totalmente alejado a las fotitos cargadas de postureo y filtros con las que nos tiene acostumbrados a deleitarnos. En este aparece la chiquilla en la camilla de un hospital y con cara de estar hasta la peineta: "Amores, no os preocupéis. Estoy algo mejor. (Por eso acabo de coger el móvil.) Me tienen que hacer alguna prueba más pero estoy mejorando, así que tranquilxs. Necesito descansar, os quiero", ha desvelado la intérprete, sin aportar datos sobre el motivo que la ha llevado a este ingreso.
Tras despertar el pánico entre sus miles y miles de followers, la influencer ha querido tranquilizar al personal anunciado que ya se encontraba en su casoplón, reposando su cuerpo serrano para recuperarse: "Ya me han dado el alta. Hace un rato he llegado a casa, pero necesito descansar. Todavía siento alguna molestia. Millones de gracias por vuestros mensajes", ha zanjado.