Cualquier ser vivo en la faz de la tierra diría que Chris Hemsworth está para mojar pan. Su papel como el superhéroe 'Thor' ha provocado que la ciudadanía del mundo desee con todas sus fuerzas que nos invadan de otro planeta para que aparezca el intérprete, martillo XXL en mano, y salve la humanidad.
De hecho, es muy habitual que Hemsworth publique los durísimos entrenos con los que pone su cuerpo a tono desde su cuenta de Instagram, mientras que la people que lo contempla se mete entre pecho y espalda un pack de cuatro dónuts del súper.
Más concretamente, el churri de Elsa Pataky se somete al programa 'Centrfit', que se basa en unas sesiones larguísimas de entrenamiento que hacen que los vídeos youtuberos de la fit girl Patry Jodan sean una mera clase de aquagym para jubilados.
O eso creíamos. Se dice, comenta y rumorea que el actor podría estar utilizando un método nada natural para aumentar los músculos de su body esculpido en el templo del deseo. Ha sido el presentador estadounidense Joe Rogan el que ha soltado la bomba en el podcast del comediante Andrew Schulz y Akaash Singh: "No se puede llegar a ser tan grande sin una inmensa cantidad de trabajo duro, ¡no hay manera!", comenzó a decir antes de espetar el dardito envenenado: "Seguro que la USADA [agencia americana antidopaje] no está llamando a la puerta de Chris Hemsworth", destapó Rogan, alegando que los turgentes bíceps del australiano son fruto de los asteroides.
Aunque el artista de melenón a lo rastafari de Tarifa no se ha pronunciado al respecto, aquí huele a envidia por parte del presentador que echa pa' atrás.