Cristina Pedroche no solo es capaz de colarse en tu televisor mientras echas la siesta después de comer en 'Zapeando', sino que también podría colarse en tu equipaje de mano sin necesidad de facturarlo, aunque ella sea de facturar bien por lucir tipín en nochevieja. Esta tía es más flexible que el horario del enchufado de la oficina.
La Pedroche, todo un ser invertebrado (que no incerebrado), también ha sido centro de la polémica tras su alegato a favor de la figura curvy, a pesar de ser 'la Pedroche tocha', estar más fuerte que una aceituna negra con vinagre y lucir transparencias el día más frío del año sin transparentar ni una molla, que le vendrían genial: ¿tú sabes lo que eso abriga?
Además, la presentadora y motivadora del odio de Donald Trump hacia la App de los bailes ha demostrado no ser muy puntera en tecnologías, ya que no se ha pasado al 'Reels', el TikTok de Hacendado que ha estrenado Instagram para hacerle pupita. La aplicación con nombre de canción de Kesha ya es muy 'agosto 2020', está demodé. Si lo usas, eres un anticuado, chaval/a, como la Pedro. Aun así, mucho mejor las fotitos que los Tiktoks, tú sigue así, Cristinita.
Creo que con este desnudo, que podría haber sido copiado de un anuncio de 'Sanex' o de un videoclip de Kylie Minogue pero sin sobarse con todo quisqui como en un capítulo de 'Élite' por la distancia de seguridad, Pedroche nos lanza un claro mensaje a lo Greta Thunberg: no gastes agua, si estás limpio, no te duches.
¿Por qué lo digo? Porque está claro que con esta pose Cristina puede percibir al mismo tiempo el hedor de sus sobacos, de sus posaderas y sus pinrreles. Un tres en uno que le permiten hacer sus entrenamientos de yoga. ¡Chúpate esa, Elastigirl! Aunque, en ese caso, le vendría muy bien el 'Sanex' de 'roll on' (rolón en mi pueblo) que podría anunciar...