¿Pero qué le está pasando al mundo? ¿Será que Cupido sufre de cataratas por la edad? ¿Hacia dónde estará mandando sus flechas del amor? No lo sabemos poproseros, lo único que nos queda claro es que siguen creciendo las noticias de rupturas, los rumores de infidelidades y separaciones…
¿Quiénes han tocado ahora? La empalagosidad hecha personas, Tom Cruise y Katie Holmes. Según algunas publicaciones la pareja más pegajosa de Hollywood ya no vive bajo el mismo techo.
Al parecer los mimosones se han tomado un respiro el uno del otro y mientras Tom se ha quedado en su lujosa mansión de Beverly Hills, Katie ha cogido los bártulos y se ha ido a una casa más “humilde” ¿Os imagináis vivir en una casa con cuatro habitaciones en las colinas de Hollywood? Exacto la sencillez personificada.
Unos dicen que es una ruptura en toda regla mientras que otros afirman que Katie Holmes sólo necesitaba un poco de espacio para ella misma, porque claro a ver ¿Qué espacio tienes en una mansión de 5.000 metros cuadrados? Si ahí tiene que ser difícil hasta encontrarse. El caso es que algunas fuentes cercanas aseguran que la actriz quería alejarse del bullicio, de la prensa y de paso de Tom Cruise.
Ansía tener privacidad y libertad. Katie puede relajarse totalmente, andar en pijama, hablar libremente con su familia por teléfono y sentarse al lado de la piscina en el patio trasero.
Hasta ahí me suena normal, lo raro es que según afirman las mismas fuentes, Katie se ha asegurado que de ninguno de sus trabajadores sea la de religión que hizo huir a Isabella Cruise del hogar.
Ha seleccionado e investigado a su propio equipo de empleados y ninguno de ellos son afiliados a la Cienciología.
Habrá que esperar para saber si la separación realmente es temporal o por el contrario las excentricidades y la presión mediática han podido con su pomposo amor.
Vía| ShowBizSpy
Foto| Katie Holmes
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