¡Qué alguien les separe que Robert Pattinson y Justin Bieber se van a tirar de los pelos!

Y desde que Justin Bieber se los cortó, lleva toda la pinta de salir ganando porque Robert Pattinson no tiene donde agarrar. Resulta muy difícil y extraño que dos artistas de su talla (por lo conocidos, no por lo buenos que sean no vayáis a pensar mal) acaben soltándose los trapos sucios a la cara como verduleras de mercado de los jueves. Por eso si ocurre es por dos motivos casi siempre: o bien porque se han tocado mucho las narices el uno al otro y ya pasan de callarse las cosas y hacer comentarios jocosos e ingeniosos para antes de ser maleducados ser mordaces, o porque todo es una farsa que se han inventado los fans para desprestigiar a uno u otro.

Y tengo que deciros que casi siempre es la segunda pero no sé porque me da que esta vez Robert Pattinson y Justin Bieber se han tocado mucho las cuerdas vocales el uno al otro, no sé porque me da chicos… Y claro, ahora que os he llamado la atención seguro que todos estáis expectantes y húmedos ante la noticia ¿que será lo que ha provocado que estos dos panolis se tiren los trastos a la cabeza? Pues las artes amatorias que tienen cada uno de ellos.

Al parecer, Justin Bieber hizo unas declaraciones en las que afirmaba que estando los dos en una fiesta tan contentos y cada uno a lo suyo, Robert Pattinson se le acercó para preguntarle que tal todo y sobre todo y lo más importante, comentarle algo que le llevaba quitando el sueño desde hace un tiempo: que le aconsejase como lo hacía para ligar tanto y le dijera un par de truquitos. Vamos, lo típico que suelen hablar los actores entre ellos.

Pero no contento con eso, Robert le debió de comentar que claro, que él usaba mucho lo de:

Hola, Mi nombre es Robert. ¿Quieres tocar mi pelo?

Pero que no se comía un colín, así que le pedía ayuda para ver que podía hacer con su vida. Y os podéis imaginar (porque huele todo o a mentira o a farsa) la cara de Robert Pattinson al escuchar todo esto. Lo primero que dijo, y fue bastante tajante de hecho, es que no le necesita para inventarse historias, que no son amigos y que él ya es famoso como para tener que ir pidiéndole consejo para como ligarse a alguna de sus groupies que el esperan en la cola del cine cada martes (modestia a parte).

Y por supuesto que otra cosa no pero feo, mal cantante y mentiroso son tres cosas que a Justin Bieber no le gusta ni un pelo (y mira que antes tenía) que le llamen, así que ha prometido hacer unas declaraciones al respecto y afirma que está muy decepcionado con Robert porque no se le imaginaba así. Y yo os digo que todo esto me huele a broma a sus fans porque aunque los dos tengan el mismo coeficiente intelectual que una pera, no creo que lleguen al extremos de airear sus líos de faldas en público, más que nada que tienen a unos asesores detrás que les impiden hacerlo ¿o no?

Vía | Ology
Foto | Dalboz17