Os presento: Lindsay Lohan el porno, el porno Lindsay Lohan

Bueno, bueno, lo de Lindsay Lohan está llegando a límites insospechados. Si pensabais que esta muchacha estaba acabada, alegraos y dad albricias por que no es así. Esta dispuesta a dar toda la guerra que haga falta y después de haber sido una de las mujeres que más rápido han ingresado en la cárcel y más rápido la han abandonado (lo que no sabemos es si allí también se habrá metido hasta las juntas de los azulejos) y ostentar el título de la celebrity que genera menos simpatía en el mundo mundial ahora toca el momento de reírse de todo y parodiarlo.

Y hasta el momento, las sex-tape con Lindsay Lohan no han sido demasiado sonadas (hasta el momento, que basta que lo diga para que mañana aparezca en medio de un hipódromo azotada por 4 mozos de cuadra), pero tranquilos que no hace falta. El porno quería conocer a Lindsay Lohan y Lindsay Lohan al porno, por eso fue la elegida para interpretar a Linda Lovelace (sí, la de 'Garganta Profunda'), pero como esas experiencias rayando los límites de los prohíbido, a Lindsay Lohan le ponen y mucho, el porno, que es muy agradecido, ha querido homenajearla.

Y por eso le han dedicado una 'preciosa' película porno.

Os diría que ya sabéis como son los argumentos de las películas porno, pero igual me os escandalizáis y me decís que vosotros no veis nada de eso... ya... pues eso, que uno que es un santo de mente pura, os dice que para todos aquellos que no hayan visto una película de alto contenido erótico, lo de que 'tienes menos hilo argumental que una película porno', es tan cierto como que Coco el monstruo de las galletas padecía una diabetes de tres pares de caballos. Pero con esta, como que han hecho una excepción: "Hustler's Untrue Hollywood Stories: Lindsay Goes to Jail" ¿Os imagináis de que va?

Pues Scarlett Fay, que ha sido la rubia encargada de darle vida a la Lohan, interpreta a una chica mala, mala, mala, que en un principio fue sentenciada a 90 días de cárcel pero que al final, por unas cosas y por otras la condena se le reduce a trece días. Durante esos días, nuestra particular Lindsay Lohan es internada en el UCLA Medical Center, un centro de rehabilitación para completar la segunda parte de su sentencia, la cual le obliga a cumplir un programa de desintoxicación.

Y hasta aquí la historia es verídica. Lo de que luego los policias se fijan en ella, que a ella se le queda pequeña la cárcel y dentro empieza a hacer calor, que los seguratas le niegan una toalla para secarse el sudor y le aconsejan que se quite ropa para estar más cómoda y lo de que ella se da cuenta de que lo del hipódromo no tiene mucho futuro, pero que le den mambo esposada a los barrotes tampoco puede estar tan mal... pues eso, que imaginamos que no es verídico. Imaginamos, claro está...

Vía | Celebrities.ninemsn Foto | poptorrent