Fue el pasado 31 de diciembre cuando Irene Baldwin anunció a su ejército de followers que estaba esperando a su primer bebé. Tras varios meses compartiendo los avances de su embarazo, la muchacha ha organizado el baby show de la criaturita con un sarao que estamos segurísimos de que no te esperarás dada la temática de este.
Y es que la fiesta tuvo lugar en un local de striptease, hubo mucho alcohol y comida, y la futura mami se embutió en un modelito de ropa interior de encaje, al que añadió un pelucón rosa: "El primer club de striptease del bebé", reza en la tarta que se hincaron en el evento.
Pese a lo difícil que resultaba arrebatarle el protagonismo a Baldwin, hubo una individua que lo logró. Su madre, Kim Basinger, quien se plantó en la party en honor a su nieto con un rostro que nos ha dejado al borde del ataquito de ansiedad.
La que fuera la chica Bond en 'Nunca digas nunca jamás' en la década de los ochenta fue captada por flashes con un careto propio se pasar por múltiples retoques estéticos y no del todo acertados.
Aunque la que tuvo, retuvo, Kim, a sus muy bien llevados 69 tacos, luce la cara más hinchada de lo habitual y súper estirada, cual mix entre la madre de Paris Hilton, Kathy Hilton, y Cristina Cifuentes, haciendo evidente que su última visita al cirujano para quitarse años del DNI le ha jugado una mala pasada.
#KimBasinger made a rare public appearance Monday night at her daughter #IrelandBaldwin’s baby shower. https://t.co/eWcZ9Ssizt pic.twitter.com/3ZILMBgSNn
— New York Post (@nypost) March 9, 2023
Fotos | Instagram de @irelandirelandireland