Kiko Matamoros y su chica pasaron un segundo confinamiento en una habitación de hospital, así que en cuando el grandullón recuperó algo de fuerza se piraron de vacaciones, ¡y fuera de España!. No sabemos dónde, se trata de un secreto de estado, una información protegida, pero tenemos claro que Kiko está en las mejores manos, en las de su enfermera, López Álamo.
Matamoros no se deja ver el pelo (la calva), no aparece en fotos ni publica nada en redes, y ahora entendemos por qué. Resulta que Kiko no quiere que le saquen tal y como está: "No quiero que me saquen con el aspecto que tengo" ha dicho para revista Lecturas. El ex-musculitos ha perdido 14 kilos tras su paso por el hospital.
El progreso del estado de salud del colaborador de 'Salvame' es muy bueno. "No he tenido ninguna complicación. Marta me hace las limpiezas de cateter, ella sabe cómo tiene que hacerlo porque se lo explicaron", ha dicho Kiko para revista Lecturas. ¡Madre mía! Estos son más que novios. Cuando eres capaz de hacerle una limpieza de cateter a tu pareja es que es amor verdadero.
Sabemos que todo va bien, pero no sabemos el paradero de la pareja de moda. La influencer Marta López ha dado alguna pista a través de Instagram, pero ni sus propios seguidores han adivinado el paradisiaco destino de los novios.