Estaba más que claro que Britney Spears iba a volver a lo grande y pisando muy muy fuerte y así ha sido con este videoclip de lo más esperado. Yo reconozco que la canción no me acaba de convencer, pero el vídeo creo que no va a dejar indiferente a nadie y además lo veo como una demostración de que su cuerpo ha vuelto (cada cosa en su sitio y fuera lo que no tenía que estar, a pesar de los retoques de imagen, no lo vamos a negar y más viendo fotos a diario de ella), porque claramente es un exhibicionismo contínuo desde el mismo momento que empieza con esa escena de la sauna completa e íntegramente desnuda (escena que se repite en varias ocasiones), además de demostrar que ya no hay ningún modelito que no pueda lucir.
Después de tanto tiempo e idas y venidas yo creo que se ha recuperado como artista en su estad más puro. Ahora ya si os gusta o no es otra cosa. ¿Nos encanta o lo odiamos? Es bastante sencillo.
Vídeo | Youtube
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