Tamara Falcó e Iñigo Onieva, de vacaciones pero separados: la religión y la juerga distancia a la pareja

No hay verano que se aprecie sin que nuestros famosetes favoritos nos pongan los dientes largos con un sinfín de instantáneas de las vacaciones deluxe con las que le han dado a su cuerpo alegría Macarena. Este es el caso de Tamara Falcó e Iñigo Oniega que, tras pasar unos días juntitos y revueltos en Mallorca, han separado sus caminos por dos destinos que son como el agua y el aceite. Vaya, como ellos en sí.

Pero que no cunda el pánico porque los tortolitos estás más felices que nunca solo que tienen gustos diferentes a la hora de pasarlo padre. La colaboradora de 'El Hormiguero', sucumbida por su fervor religioso, ha puesto rumbo a Serbia con el fin de rezarle a la Gospa (AKA, la Virgen de toda la vida) y gozarlo en la fiestuqui del Rosario:

"Han sido unos días maravillosos en 'Youth Festival in Megugorje' de la mano de la Gospa (La Virgen en serbio). He llorado, reído, cantado y evidentemente rezado. Para todos los que estéis leyendo esto es que la Virgen os está invitando a venir es así como funciona. Yo he tenido la suerte de que mi amiga Clara y mis súper amigos de la 'Macrofiesta del Rosario' me han incluido en su peregrinación", confiesa la marquesita desde su cuenta de Instagram y recibiendo el "miss u" de su churri que la extraña a más no poder.

Por su parte, Onieva ha plantado el huevo en Turquía con su panda de coleguis y ha hecho de todo menos ir a misa de doce. Este team se ha llenado el buche en los mejores restaurantes, ha visitado las calas más top de la zona y se ha dado un voltio en un yate con motos de agua incluidas. Casi ná.