Como viene siendo habitual todos los años, el presidente Obama celebró el sábado por la noche la ya tradicional White House Correspondent’s Dinner, una cena de gala en que el presidente recibió a los corresponsales que cubren las noticias de la Casa Blanca y, de paso, a muchos rostros conocidos del cine, la música y la televisión. Vamos, que todo el mundo que esa noche quiera hacer buenos contactos o llevarse un autógrafo para sus hijos puede hacerlo, porque allí acudió todo perro quisqui, desde actores, cantantes y músicos hasta los peces gordos de las finanzas, de la política o del servicio militar. Todo ello en el Hilton de Washington y por su puesto con una alfombra roja de lujo, con un photocall magnífico en el que nuestros famosos posaron con las mejores de sus sonrisas y los mejores de sus trajes. Porque otra cosa no pero ellos perderse un sarao como este… ¡ni locos!
Y sí, todo estuvo normal, muchas risas, muchas flores (menuda gracias para los alérgicos) y algún que otro cotilleo bien sonado que ya os contaremos más adelante. ¿Queréis saber quienes asistieron?
Pues de las primeras en aparecer fueron Jane Lynch, la entrenadora con más mala leche de “Glee” acompañada de su pareja Lara Embry. Y os digo que tener a estas dos en la mesa tiene que ser un cachondeo padre, porque deben de ser la mar de saladas…
Después apareció una Mila Kunis acompañada de Wolf Blitzer, uno de los reporteros de la CNN más prestigiosos, que seguro que ni podía quitar el ojo de encima a Mila y a su Versace, porque madre mía como le quedaba a la moza el vestido… incredible.
Scarlett Johansson también acudió a la cena acompañada de Hunter Johansson, su hermano mellizo, en el que además de lucir su vestido de Elie Saab, lució nuevo corte y color de pelo que le favorece bastante a mi parecer. Y sí, Scarlett Johansson fue la protagonista de nuestro cotilleo más jugoso porque estuvo jugando toda la noche al despiste con otro de los asistentes hasta que al final les cazamos. Pero todo a su debido tiempo…
Ahora vienen mis dos mozos predilectos, que ya puede posar en traje, en chanda, en vaqueros o desnudos que siempre estarán como el queso (hombre, desnudos igual hasta pasamos de queso a requesón). Efectivamente me refiero a Chace Crawford, que vino él muy elegante luciendo un Dolce&Gabbana con pajarita…
... y del mister ojos imposibles, Ian Somerhalder, que acudió acompañado de su novia Nina Dobrev, aunque en la foto parece que nos han colado en la alfombra roja su réplica de cera porque ni el botox resulta tan exagerado como la cara de Ian. Esperemos que todo sea por culpa de los flashes, sino fíjate tú que disgusto nos llevamos…
Alyssa Milano y su maridísimo David Bugliari también hicieron acto de presencia, ella con un bombo cada vez más considerable y él… él seguro que es una buenísima persona pero yo cada vez que le veo con esas orejitas de soplillo me entra la risa. Eso sí, tanto David como Alyssa Milano hacen una pareja de rechupete.
Michelle Trachtenberg... que parece que ha salido de un cementerio, porque o se pasó con el maquillaje (que ya de por sí la nena es pálida) o el vestido, o ambos juntos. El caso es que no creo que fuera muy guapa la verdad. Con lo mona que salía siempre en Buffy sin maquillar… ahora sí que parece una vampiresa en toda regla.
Y otra de las parejitas de la noche fue la formada por Anna Paquin y Stephen Moyer y luego Ryan Kwanten que apareció pero el pobre solito y son nadie que le agarra del brazo frente al photocall. Anna Paquin con su House of Lavande y Stephen Moyer que ponga lo que se ponga, siempre le queda bien, fueron de los que más flashes acapararon sin duda alguna.
Y por último, Chris Colfer, que también hizo acto de presencia en representación del elenco de Glee junto con Jane Lynch o Matthew Morrison, muy guapo él con su traje y luciendo sonrisa. Este chico ya se puede caer el mundo a sus pies que nunca dejará de ofrecernos una sonrisa, da gusto invitarle a las fiestas, la verdad.
Fotos | Gtres
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