La nueva temporada de 'La que se avecina' está dando telita que hablar. Es mucha la people que anhela el regreso de la comunidad de vecinos más venenosa de la televisión. Sin embargo, esta 13º entrega ya cuenta con varias bajas confirmadísimas entre su elenco. Vanesa Romero (Raquel Villanueva) y Víctor Palmero (Alba Recio) son dos de los intérpretes que se han negado a retomar su papel en el formato.
Uno de los regresos más esperados entre la peña sedienta de las movidas entre rellanos es sin lugar a dudas el de José Luis Gil. El intérprete sufrió un infarto cerebral al finales del año pasado por el que estuvo 22 días ingresado en el Hospital Nuestra Señora del Rosario de Madrid y del que todavía se está recuperando: "Empieza un periodo clave, de trabajo y esfuerzo, en el que la tranquilidad, es muy importante", expresó el entorno más cercano de Don Enrique Pastor (su personaje en la ficción) por aquel entonces.
El dueño y señor de la serie, Alberto Caballero, ha concedido una entrevista para '¡Hola!' donde ha manifestado lo tristísimo que se encuentra sin Gil frente a las cámaras: "Siempre da pena perder a personajes, aunque sea temporalmente... Pero cuando esa baja es involuntaria es doblemente dolorosa".
El churri de Miren Ibarguren ha dejado clarinete una cosa, y es que el papel al que dio vida el zaragozano, sigue libre y esperando ansioso su vuelta: "José es familia, ha estado a nuestro lado desde el capítulo uno de 'Aquí no hay quien viva', y nos da mucha rabia que no pueda estar en un momento tan bonito de la historia de la serie y de la productora. Pero volverá", ha sentenciado el director, alegando que no se le va a hacer ningún tipo de homenaje al artista puesto que confían en su regreso.
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