La influencer de las influencers se ha sincerado sobre el tema más polémico de todos los tiempos: el money-money que se puede llegar a ganar en redes sociales siendo 'Instagramer'. Nosotros, desde nuestras humildes casas, solo vemos cochazos, restaurantes, bolsos de marca y muchos perritos Pomerania. Pero, ¿es un espejismo o realmente se gana tanta pasta?
Violeta Magriñán ha cogido su cámara y ha grabado el que podría ser su vídeo más polémico. En primer lugar, ha confesando que su vida ha cambiado radicalmente, y que de ganar menos de 1000 euros al mes ha pasado a tener una vida muy cómoda. No, no ha desvelado cuánto gana, pero ha asegurado que tiene "compis de curro" que cobran muchísimo dinero por un post en Instagram.
También ha admitido que se da caprichitos un tanto caretes, como bolsos de grandes firmas, zapatos o comidas en los mejores locales de la capital. "Es una tranquilidad no tener que mirar la cuenta al pagar, aunque yo suelo mirarla aunque me tome un menú de diez euros". ¡Madre mía! Los influencers ganan mucha pasta, está clarísimo.
Además, Violeta ha revelado que su mayor capricho fue comprarse su queridísimo Land Rover y que su próxima adquisición ya sabe cual es: una casa como Dios manda. ¡Jesús! Esta se pilla una mansión al estilo de la Campos. O mejor todavía, lo mismo Mari Tere le vende su casoplón. ¿Le preguntamos?
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