La Pantoja acaba de cumplir 66 tacos, y aunque todavía no tiene el ánimo para mucho sarao', ha abierto las puertas de Cantora para recibir a sus seres queridos. Atrás quedaron los fiestotes de infarto que organizaba en la finca. Aquellas eternas jornadas de cante, baile y mucho gin tónic ya no existen pero, poco a poco, Isabel se recupera tras la muerte del su madre.
Una de las invitadas a la 'party flamenca' de la Panto fue su hija, Isa P, y es precisamente ella quien ha largado todos los detalles en el plató de Ana Rosa. Al parecer, fue una celebración tan aburrida como ninguna otra. Hubo tarta, pero las velas las había soplado el día anterior y nadie se molestó en encenderlas de nuevo. También hubo gazpacho, pero a diferencia de otros años, esta vez Isabel no se pasó con la cantidad.
El zumo de tomate es el plato estrella de la cantante, y cada vez que cumple años agasaja a sus invitados con varios litros. En esta celebración, sin embargo, todo fue más sencillo. No hubo sobreproducción de gazpacho, ni cante, ni baile, ni cientos de cubatas ni cigarrillos. Fue algo íntimo y familiar, aunque hubo una ausencia importante: la de Kiko y su familia.
Rivera, Irene y sus dos retoñas se quedaron en el sofá de su casa y dejaron tirada a la yaya Pantoja. El conflicto entre el dj y su madre continúa, aunque, según Isa P, la tonadillera tenía la esperanza de ver entrar a su pequeño del alma por la puerta.
Ver todos los comentarios en https://www.poprosa.com
VER 0 Comentario