Con el bodorrio a la vuelta de la esquina, la expectación aumenta por minutos. Por increíble que parezca, Tamara Falcó está a punto de casarse con Onieva, el hombre que la engañó meses atrás al darse el lote con otra en un festival. Y sí, aquello ya es pasado superado, pero en enlace cobra más valor precisamente por eso. La exclusiva la cebó el propio Íñigo cuando se comió el boquino con una jovenzuela en aquel fiestón.
Él no lo sabía, pero su infidelidad aumentaría el caché de su reportaje de boda. Que Tamara contraiga matrimonio con el muchacho que meses atrás la traicionó públicamente no tiene precio. Miento, sí lo tiene, y la revista del saludo está dispuesta a pagarlo. Al parecer, se trata de una cifra millonaria.
Sea como sea, está claro la marquesa y su chorbo se sacarán un pastizal. Como no puede ser de otro modo, en portada también aparecerá la reina de corazones, Isabel. Sin ella, el precio caería en picado. Tal y como confirmó la novia en su última estrevista, Preysler ya tiene su vestido: "Su vestido también se lo escogí yo. Lo vi en un desfile y supe que era perfecto para ella. Ayer estuvimos probándolo y me encanta cómo le queda. Pero, claro, a ella siempre le queda todo bien".
"Estoy feliz de que me acompañe a todo. Por ejemplo, en la elección de las mesas, porque es una persona con muchísimo criterio y tiene siempre algo que aportar", comenta Tamara. "Mi madre está emocionada. Hemos tenido la oportunidad de pasar dos semanas en la clínica Buchinger, mano a mano, y hemos viajado juntas a Nueva York para ver mi vestido. Ella, Wes y su equipo se llevaron divinamente desde el principio. Además, le encanta cómo me queda...", dijo para su revista de cabecera.
Fotos: Gtre
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