Ya habíamos hablado que Paris Hilton iba a convertirse en un demonio para la serie ‘Supernatural’, así que ya que esta semana se ha emitido en Estados Unidos el capítulo, qué menos que comentar un poco esa faceta de actriz que me resulta más espeluznante que la propia trama.
Prometía ser un capitulo por lo menos muy bizarro y no estuvo nada mal para mi gusto, quizá faltaron algunas cosillas para darle más vidilla a la historia, pero no estuvo mal. Eso sí lo de Paris es que es mucho. La chica lo intenta y no es que sea mala actriz, quizá es simplemente peor, aunque no le faltan buenas intenciones, la verdad sea dicha. Lo mejor fueron ciertos comentarios del guión muy graciosos cargados de dobles intenciones.
Para los que no queráis spoilers hago el comentario a continuación donde podréis ver un vídeo y alguna foto más del capítulo.
Para empezar decir que Paris Hilton interpretaba a un dios (para que su ego se haga un poquito más grande si cabe) que toma la forma de los ídolos que cada persona tiene para luego comerse a sus víctimas (sí, bello, bello, lo sé). Resulta que el ídolo de una niña era ella (curiosamente) y ahí la tuvimos. A partir de ese momento suelta una disertación sobre lo curioso que es que antes se venerase a verdaderos dioses y ahora sean las celebrities las que ocupan ese lugar, habiendo convertido en biblia de sabiduría y conocimiento a Us Magazine (ah, no, donde esté el Hola que se quiten todos). Verdad no le falta, pero oír precisamente eso de boca de la que encabeza diariamente noticias de ese tipo, pues es la leche, es lo que tiene el juego de la doble moral hecha show televisivo. Me encanta.
Aquí tenemos una escena del demonio y de Dean Winchester donde le dice que él no es el BFF (mejor amigo) de Paris Hilton y nunca ha visto ‘La Casa de Cera’, gran película que fijo fijo no pasará a los anales del séptimo arte, buenona donde las haya (léase en tono irónico)...
Luego hay un gran momento en que la Hilton le patea el culo de buena manera a Dean porque también tiene superfuerza, no es que le pegase con el brillo de labios en un ojo.
Aquí la escena completa.La verdad es que aunque sólo fuera por ver a Jensen Ackles (sobre todo) y el cuerpo de Jared Padalecki merece la pena, por ella, como que no mucho aunque de vez en cuando ver que curra tampoco está mal.
El caso es que ella ha quedado encantada de haber participado, más feliz que una perdiz (a mi también me pasaría con semejantes bombones), así que ya ahora ya que ha trabajado un par de días por lo menos debería tomarse un año sabático no sea que se vaya a estresar.
En poprosa | El fin está cerca, Paris Hilton está harta de salir de fiesta