Está claro. Ortega Cano está incontrolablemente desquiciado. Lleva meses aguantando el chaparrón mediático propiciado por la incontinencia verbal de su mujer, y tan solo un par de días antes de visitar el plató de Ana Rosa Quintana, el torero ha cometido el mayor de sus errores al encontrarse con la prensa: intentar agredir a un reportero.
Sabíamos del carácter de Ortega, pero sacar la manita a paseo sobrepasa cualquier límite. Todo ocurría en la tarde del viernes, cuando varios reporteros (y José Antonio Avilés) se topaban con el torero en la entrada de Las Ventas y decidían preguntarle por su próxima entrevista en televisión.
Al principio guardó silencio, pero en un momento dado, harto de escuchar especulaciones acerca de su matrimonio, el diestro sacó la diestra e hizo el amago de agredir a un reportero. Este, asustado, decidió alejarse de Ortega. Más tarde, entraba en directo en 'Sálvame': "Estoy muy nervioso", decía Sergio Pérez Díaz, el que también fuera colaborador de 'Viva la Vida'.
El esposo de Ana María, lejos de pedir disculpas, siguió su camino junto al resto de su cuadrilla. El lunes visitará las instalaciones de Mediaset para sentarse junto a Ana Rosa Quintana, y conociendo a la presentadora, no dudará echarle una buena reprimenda por tener la mano suelta.
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