Lucía rompe su amistad con Lola en 'La Isla de las Tentaciones 3' tras lo ocurrido bajo las sábanas: "Dice que no pasó nada con Carlos, me ha mentido en mi cara"

Cuando Lola propuso a Lucía compartir habitación en esta tercerda edición de 'La Isla de las Tentaciones', seguro que la gaditana le hizo las preguntas rutinarias obligatorias que todo compañero de cama debe responder: 

¿Roncas? ¿Te tiras pedos? ¿Te mueves mucho? ¿Eres sonámbulo o hablas en sueños? ¿Tienes una dentadura postiza que vas a poner en un vaso con agua encima de la mesita de noche? Suelen ser algunas de las más repetidas.

Nada nuevo, pues es el típico test homologado de la Unión Europea sobre compitruenos al que ahora, después de ver lo que le ha ocurrido a Lucía, vamos a tener que añadir una nueva pregunta más: ¿Serías capaz de salpicarme por alguna circunstancia mientras duermo? (Si lo cuestionamos así, matamos dos pájaros de un tiro al descubrir si hay pérdidas de orina).

Lola ha querido jugar al despiste sobre lo que ocurrió en su alcoba con Carlos y en presencia (muy a su pesar) de Lucía, con la táctica que se conoce como 'el método Miguel Bosé': decir ni que sí ni que no cuando todo el mundo sabe que le das al bacalao tostado.

Una actitud que ha molestado mucho a su amiga Lucía, con la que horas previas estaba llorando por Diego sobre las mismas sábanas que luego ha tenido que echar a lavar con el programa de 'lavar en seco' (porque ya estaban empapadas).

Lucía tenía sus sospechas mientras dormía. Esa cara de placer que ponía Lola solo tenía una explicación: sus sueños eróticos con Carlos se estaban haciendo realidad. 

Como la Belén Esteban de Puerto Real que es (exnovia del Jezulín de Ubrique de su pueblo), la gaditana ha cotejado información sobre lo que ocurrió en su cama. Carlos, el rubiales sevillano que arrimó su Giralda a Lola, le ha confirmado sus sospechas: le restregó 'toa, toa, toa, la cebolleta toaaaa' (así lo cantaría su Manué).

"La próxima vez me echas de la cama, suficiente ridículo estoy pasando ya con Manuel. Carlos, me has estado tomando el pelo, tenías citas conmigo porque no había otra. Cuando se ha quedado libre la que le gustaba, ha atacado. No tengo suficiente con que mi novio me ponga los cuernos sino que también mi mejor amiga se tiene que enrollar con mi tentador favorito en mi cama", se ha quejado Lucía tras su sesión de reconocimiento con el Jhonny Bravo andaluz con el que Lola todavía se tiene que pegar al chorrito de la pared de la piscina tal y como se filtró.

La concursante best seller por su oda a "las manitas relajás" ha seguido siendo rigurosa con el orden preestablecido en el método científico del cotilleo. Tras verificar la información vía Carlos (un paso optativo en la rumorología), Lucía ha pasado al cónclave de radiopatio para comentar la jugada con pase a puerta y gol de Carlos y Lola mientras que ella dormía a su lado.

"Yo los estaba escuchando, medio dormida, y estaban gimiendo (ha imitado ella el sonido al más puro estilo 'Tu Orgasmo Me Suena'). Tía, hazme por lo menos una señal y dime vete. Yo me voy, a mí no me importa", comentaba indignada la afectada junto a Marina, Lara y Claudia mientras que se presagiaba una ruptura de 'Las Cheetah Girls' de República Dominicana.

Tras negar lo ocurrido por activa y por pasiva, Lola ha dado el paso de reconocer públicamente en la piscina sus manualidades Art Attack con el sevillano, motivada por el mal rollo y los corrillos que se estaban formando en la casa. "Se estaban riendo de mí", ha comentado Lucía por lo bajini al conocer por fin la verdad consensuada por sus dos compañeros de cama.

Lola ha seguido siendo perseguida por su culpa como el cobrador del frac a Isabel Pantoja. La novia de Diego se ha disculpado con Lucía por haber sido tan mala amiga con ella y por haberle mentido cuando le preguntó en la habitación si le había sacado la punta al lapicero de Carlos el guarrindongo.

"Solo quiero decirle que la quiero, que aquí me tienes para siempre. Si te he hecho daño, por favor, perdóname. Igual no sé apoyarte como tú lo necesitas", decía Lola llorando a moco tendido en la hoguera tras ver las imágenes del novio de Lucía. Hombre, ya te digo yo, Lolita la piconera, que tu amiga no necesitaba que la apollases con la corneta de Carlos de forma tan literal...

Lucía ha manifestado que ya no se fía de Lola, que le hizo durante la noche varias señales para que su amiga le dijera si estaba ocurriendo algo y que estaba tan ocupada que no le contestó:

"Sabía perfectamente que ella me estaba mintiendo, me hubiera gustado que, ya que le pregunto, me dijera que sí aunque no me contara detalles", ha insistido la mujer a la que nadie hace caso con eso de la manita relajá.

Lola ha querido dejar claro que se arrepiente de sus jueguecitos con Carlos por todos (por ella, por Lucía, por Diego...), aunque especialmente por su perro.

Lucía, en cambio, tiene claro que su amistad se ha roto (esperemos que no la tire también a la hoguera): "Yo ya no puedo tener la misma confianza con ella, lo mismo me pega una puñalá trapera que a los cinco minutos me dice perdóname", ha sentenciado la andaluza.

Vía | Mitele Plus