Juls Janeiro y su churri, Tommy Rossi, se han desplazado hasta el hospital en el que se encuentra ingresada María José Campanario. El pequeño Hugo llegaba al mundo el martes a las 23:00, pero su hermana Julia no estuvo allí para recibirlo. La joven tenía que examinarse del carnet de conducir y, hasta hoy, no ha visitado al pequeño.
María José continúa ingresada y Jesulín, al parecer, se ha transformado en Casper. El torero está utilizando una puerta secreta para entrar y salir del hospital y así evitar a la prensa, y lo cierto es que la estrategia le está funcionando. No hay imágenes del torero y mucho menos de su esposa.
La única cara conocida que vimos por allí fue la de Beatriz Trapote, que se presentó en el centro médico con una cesta en tamaño XXL a modo de obsequio. La mujer de Víctor Janeiro vio en la tele que había periodistas y se lanzó a comprar el detalle más caro para no quedar como una cutre. Aunque para cutre, la joven Juls, que no se dignó a visitar a su madre hasta que tuvo el permiso de conducir en sus manos.
La Campanario salía de cuentas el martes, pero Juls llegaba al hospital esta mañana. La prensa ha captado como la joven, acompañada por su inseparable churri, entraba en el parking de la clínica. Nada más bajar del coche, Juls se dirigía hacia la entrada del edificio a toda prisa. Seria y visiblemente molesta por la presencia de los reporteros, la hija de Jesulín no ha dicho ni mú.
Su novio, Tommy Rossi, tampoco ha pronunciado palabra. Según comentaba una de las reporteras de 'El Programa de AR', el muchacho habría empujado a una compañera de prensa: "Tommy incluso ha empujado a una de nuestras compañeras y no han dicho ni 'hola", explicaba.
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